El Parlamento Europeo ha votado en una sesión plenaria (con 438 votos a favor, 152 votos en contra y 71 abstenciones) solicitar formalmente al Consejo Europeo una sanción para Polonia contemplada en el artículo 7.1 del Tratado de la Unión Europea (UE).
Mediante este procedimiento, la UE puede sancionar y dar recomendaciones a un país miembro cuando existen evidencias claras de violación de los valores mencionados en el artículo 2, que recoge el respeto a la libertad, igualdad, democracia, Estado de Derecho, diversidad racial, igualdad entre hombres y mujeres, entre otros. Su aplicación necesita de la aprobación de todos los Estados de la UE representados en el Consejo, exceptuando, en este caso, a Polonia.
El parlamento también está preocupado por la falta de democracia y separación de poderes en Polonia, así como por la simpatía del gobierno polaco, de ideología ultraderechista, por las causas racistas y machistas.
El sábado pasado se produjo una manifestación a la que acudieron 60.000 personas bajo el lema “Queremos a dios”, en el día de la Independencia de Polonia. La marcha, que fue organizada por la extrema derecha, defendía las raíces católicas del país de forma excluyente, mientras atacaban a los refugiados y acusaban a Bruselas de la “islamización” del país.
Exactamente el mismo discurso que apoya el gobierno. Pese a que Polonia es uno de los países de la UE con los índices de inmigración más bajos, se escucharon consignas como «Largaos con los refugiados» o «Polonia pura, Polonia blanca».
El ataque contra los derechos de las mujeres también es considerado inaceptable por el Parlamento Europeo. Tras la aprobación de nuevas leyes en el parlamento polaco en agosto, las mujeres necesitan receta para acceder a la píldora del día después, lo que ha sido calificado por Amnistía Internacional como “una catástrofe para la víctimas de violación y una «restricción de derechos».
En este sentido, el Parlamento Europeo pide al gobierno polaco «proporcionar anticonceptivos gratuitos y accesibles, sin discriminación y facilitando la disposición de anticonceptivos de emergencia sin receta médica».
Varias organizaciones en defensa de los derechos de las mujeres llevan meses manifestándose contra un gobierno cuyo país tiene las leyes más restrictivas sobre el aborto en Europa.
Durante la sesión plenaria celebrada en Estrasburgo, el eurodiputado polaco Ryszard Legutko, miembro del partido gobernante en su país, acusó a la UE de llevar a cabo «una cruzada ilegal contra Polonia».
El siguiente paso corresponde a la comisión de Libertades Civiles, que deberá redactar una propuesta que será enviada al Consejo Europeo.