El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha advertido hoy a Rusia de que si continúa apoyando a los separatistas prorrusos en el este de Ucrania «sólo traerá más costes y consecuencias» para el gobierno de Vladimir Putin. Costes y consecuencias que se traducirían en más sanciones económicas que hasta ahora han sido «eficaces» y han dejado a Rusia «más aislada que en ningún momento desde el final de la Guerra Fría», señaló el presidente estadounidense.
El mandatario anunció que hoy conversó con Merkel sobre la situación en Ucrania y ambos estuvieron «de acuerdo en que Rusia es responsable por la violencia en el este de Ucrania». «Rusia ha violado deliberada y repetidamente la soberanía y la integridad territorial de Ucrania, y las nuevas imágenes de las fuerzas rusas dentro de Ucrania han dejado eso claro para que todo el mundo lo vea», sentenció Obama desde la Casa Blanca, que recordó que habrá consultas sobre la crisis ucraniana durante la cumbre de la OTAN la próxima semana en Gales (Reino Unido).
Obama evitó hablar de «invasión» al reaccionar en una conferencia de prensa a la denuncia del presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, de que tropas regulares rusas con armamento pesado han entrado en territorio ucraniano, y lo definió en cambio como una «continuación» de las acciones de Rusia en ese país «en los últimos meses».
El presidente de EE.UU., Barack Obama, y la canciller alemana, Angela Merkel, advirtieron hoy que el Gobierno estadounidense y la Unión Europea (UE) considerarán «más sanciones» contra Rusia a raíz de los movimientos de tropas rusas en territorio ucraniano que ha denunciado Kiev.
Rechaza una acción militar
Obama, no obstante, afirmó que Estados Unidos no recurrirá al uso de la fuerza «para resolver el problema ucraniano», sino que su intención es confeccionar un frente común de países aliados para presionar a Rusia para que deponga de su actitud en Ucrania.
«Es evidente a los ojos del mundo entero» que fuerzas rusas se encuentran en Ucrania, afirmó el jueves el presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
Un poco más temprano, el departamento de Estado dijo que no excluía «ninguna opción» en cuanto a una eventual ayuda militar estadounidense en Kiev. Ucrania pidió este jueves a Occidente «sanciones significativas» y una ayuda militar «de envergadura», haciendo temer una guerra abierta entre Rusia y Ucrania.
Además, anunció que recibiría a su homólogo Poroshenko el próximo mes en la Casa Blanca.
Obama debe acudir la semana próxima a Estonia y después a Gales para una cumbre de la OTAN. Ucrania no pertenece a la Alianza Atlántica, «Pero algunos estados cercanos lo son», remarcó, al evocar el artículo 5 de la Carta de la OTAN, que prevé la solidaridad entre sus miembros en caso de agresión.