El Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), grupo extremista que controla amplias zonas de Siria e Irak, declaró este domingo la instauración de un califato islámico.
En un documento titulado «Esta es la promesa de Alá» y difundido a través de las redes sociales, el grupo informó de que sus líderes «han resuelto anunciar el establecimiento del califato islámico y la designación de un califa para todos los musulmanes«, que será el jefe del EIIL, Ibrahim ibn Awad, más conocido como Abu Bakr al Bagdadi.
La organización califica a Al Bagdadi como «el imán y califa para los musulmanes en todo el mundo».
De la misma forma, el EIIL anuncia que elimina la parte «de Irak y el Levante» del nombre del grupo, por lo que pasa a denominarse como «Estado Islámico» únicamente.
El califato es el sistema político que rigió entre la comunidad musulmana desde el nacimiento del islam con el profeta Mahoma y pervivió, en diferentes formas y lugares, hasta el final del califato otomano, que Mustafa Kemal Atatürk abolió a comienzos del siglo XX para crear la nueva república de Turquía.
El califa es la máxima autoridad religiosa y política del califato, cuya norma jurídica es la «sharía» o ley islámica.
«Aclaramos que, con esta declaración de califato, es imperativo para todos los musulmanes jurar lealtad al califa Ibrahim y apoyarle», afirma la organización yihadista, escisión de Al Qaeda.
Según esta declaración, además, «la legalidad de todos los emiratos, grupos, estados y organizaciones queda anulada por la expansión de la autoridad del califa y la llegada de las tropas a sus áreas».
Esta acción llega después de que el gobierno y ejército iraquí lanzara una ofensiva para recuperar la ciudad de Tikrit, tomada por los insurgentes. El gobierno asegura haber abatido a varios terroristas.