El primer ministro galo, Edouard Philippe, ya había anunciado el inicio de este proceso de consultas el 4 de diciembre, cuando confirmó también que se aplazaban las medidas fiscales que debían entrar en vigor el 1 de enero y que iban a provocar un aumento del precio de los combustibles.
El Consejo de Ministros ha dado luz verde a este proceso, que considera «inédito por su forma y amplitud». El Gobierno quiere apelar a los ciudadanos para que estos se impliquen «más directamente» en la elaboración de políticas públicas que tienen una especial repercusión «en su vida cotidiana», ha informado el Elíseo en un comunicado.
El Ejecutivo ha esgrimido que las soluciones «no pueden ser concebidas exclusivamente desde el poder central», por lo que prevé llevar a cabo diversas iniciativas a nivel local, asociativo o en Internet durante este periodo de debate, que durará del 15 de diciembre al 1 de marzo.
En su alocución del lunes, el presidente, Emmanuel Macron, defendió la importancia de este proceso para sacar adelante «un nuevo contrato de la nación» y prometió reunirse en los próximos meses con autoridades locales, en un intento por aplacar las protestas de los ‘chalecos amarillos’, que se han intensificado en las últimas semanas.