Si el partido conservador gana las próximas elecciones británcas, que tendrán lugar en mayo de 2015, casi la mitad de los ciudadanos del país pagarán menos impuestos. La promesa electoral de David Cameron pretende así dirigirse a las clases medias, aunque también ha hecho promesas para los salarios más altos del país. Durante su discurso en Birmingham, para conseguir «lo que necesita Gran Bretaña», reduciendo la inmigración del este de Europa y aboliendo el Decreto de los Derechos Humanos, medidas dirigidas a intentar ganarse a sus diputados que marchan a UKIP.
En su última conferencia antes de las elecciones, el primer ministro aseguró que los que tienen el salario mínimo no pagarán impuestos sobre la renta. Sin embargo, en su discurso reveló que recortará los impuestos a los salarios más altos en un 40%.
David Cameron sacó a lucir su arsenal preelectoral este miércoles, prometiendo un recorte de 7 mil millones de libras en recortes de impuestos para el año 2020, dirigidas principalmentes a aquellos con salarios por encima de la media y sin ningún apoyo de financiación.
Con su partido todavía por detrás de los laboristas en las encuestas y bajo la sombra de UKIP, el primer ministro cerró una conferencia en Birmingham asegurando que las próximas elecciones se disputarán sobre el tema de la credibilidad y pidiendo a los votantes que se crean sus promesas.