Kate Middleton lo ha vuelto a hacer: ha vuelto a deslumbrar con su espectacular vestuario, y ha sido durante una cena de gala que se celebró en la Universidad de St. Andrews, precisamente el lugar en el que, hace ya 11 años, surgió el amor entre ella y el príncipe Guillermo. Fue allí cuando, durante un desfile solidario en el que Kate aparecía un tanto sugerente en ropa interior y transparencias, el heredero a la corona británica se fijó en ella.
Durante la cena, que tuvo lugar en la noche del miércoles, Kate no dudó en recordar son simpatía ese momento al decirle a una de las alumnas: «Espero que no participes en un desfile de moda, nunca se sabe qué te van a pedir que lleves puesto».
Luciendo su anillo de compromiso y su alianza matrimonial, como ya es habitual en ella, Kate causó sensación con un vestido de encaje negro y nude de la diseñadora Alice Temperley, como señala Daily Mail, y que por cierto ya utilizó en el estreno de War Horse.
La joven pareja recordó con cariño sus días de universidad. El príncipe indicó que tenía «recuerdos felices y alegres, tiempo de inviernos fríos y buenos amigos» y describió a Kate, con quien estudió Historia del Arte, como una «gurú del arte, ¡era mucho mejor que yo!». Por su parte, Kate se lamentó de no haber aprovechado esos tiempos para aprender a jugar al golf.