¿Consumo colaborativo o una práctica ilegal? Los taxistas lo tienen claro: Uber Pop es una práctica ilegal. Esta aplicación que conecta a coches con chófer y potenciales pasajeros a través de una App ha puesto en pie de guerra a los taxistas españoles y de media Europa. La gota que colmó el vaso la puso esta misma semana la comisaria europea de Agenda Digital, Neelie Kroes, al señalar que “Uber Pop no es el enemigo de los taxistas”.
Las principales asociaciones de taxistas españoles han convocado para este miércoles una huelga para protestar por esta aplicación. Consideran que se están vendiendo un servicio ilegal de transporte bajo un paraguas de economía colaborativa. “No estamos en contra de las aplicaciones que facilitan el contacto entre personas que quieren realizar un mismo viaje, estamos en contra del lucro y del beneficio por este servicios”, afirma el vicepresidente de la Asociación Profesional del Taxi de Madrid, Jesús Fernández.
Desde las asociaciones piden que los conductores que realizan estos viajes tengan una licencia de transporte de viajeros siempre y cuando haya un beneficio económico. “Existen plataformas para el transporte de taxis o vehículos de gran turismo y todos ellos tienen sus licencias y pagan sus impuesto, mientras que las aplicaciones como Uber Pop no pasa esto”, afirma Fernandez.
“En el caso de BlaBlaCar el hecho de que se comparta el coche me parece bien, lo que no me parece bien es que se cobre si es economía colaborativa. Muchas veces piden más dinero que lo que son los gastos, por lo que hay beneficios. Además, los conductores no pagan las licencias, los seguros y las tasas que pagamos los taxistas por lo que son como los taxis piratas”, destaca el vicepresidente de la Asociación Profesional del Taxi de Madrid.
Uno de los puntos más criticados desde las asociaciones que es esta aplicación potencia la economía sumergida, “la gente puede hacer estos servicios sin pagar a Hacienda, sin cotizar a la Seguridad Social y sin ningún tipo de responsabilidad legal. Nosotros los taxistas podríamos hacer lo mismo y ganaríamos más dinero y no pagaríamos impuestos”.
En el caso de Uber Pop los taxistas consideran que es ilegal y creen que el comunicado de Fomento lo deja bien claro aunque piden más. Sin embargo, en el caso de BlaBlaCar señalan que es más difícil demostrarlo y controlarlo. “¿Cómo vas a demostrar que son taxis piratas? Es una plataforma legal que se basa en un tipo de servicio que es ilegal cuando hay beneficio, la dificultad está en demostrar esta transacción”, concluye Fernández.