Los yihadistas que atentaron en Barcelona formaban una célula organizada. No se trata de un lobo solitario. Esta es la principal hipótesis que barajan los expertos en terrorismo y las fuerzas de seguridad. El gran número de personas implicadas (abatidos, detenidos y huidos) hace pensar que estaba todo organizado.
Y ese plan tenía tres puntos: Alcanar, Barcelona y Cambrils. Aunque puede que no todo saliese como estaba pensado. El jueves de madrugada un piso explotaba en el pueblo catalán de Alcanar, en Tarragona. En esa detonación moría una persona y siete resultaban heridas. Los Mossos en un primer momento lo vinculaban con una explosión en un laboratorio de droga.
Pero esa misma tarde, supuestamente Moussa Oukabir, un joven de 17 años, embestía con su furgoneta a la multitud en Las Ramblas y dejaba 13 muertos y alrededor de 100 personas heridas. Él se da a la fuga pero otro supuesto terrorista es abatido y otro, el hermano del autor, detenido. A la una de la madrugada otros cinco terroristas han muerto en la localidad tarragonesa de Cambrils abatidos por los Mossos d»Esquadra, que los interceptaron cuando pretendían cometer otro atentado similar al ocurrido en La Rambla de Barcelona.
Los Mossos informan entonces de que la investigación contempla «que los terroristas abatidos estarían relacionados con los hechos registrados en Barcelona y Alcanar». ´
¿Pero cómo están relacionados?
Según expertos en terrorismo, Alcaná sería «una fábrica de bombas usando bombonas de butano y otros gases». La intención primera de la célula podría haber sido provocar un atentado con explosivos en Barcelona o cargar estas bombonas dentro de la furgoneta para hacerla explotar tras embestir contra la gente.
Sin embargo, estos gases habrían explotado por una «acumulación» dentro del piso. Al echar a perder el plan, los terroristass supervivientes podrían haber decidido »improvisar» con el material que tenían.
Fue entonces cuando realizaron los atropellos masivos de Barcelona y Cambrils.
Una gran cantidad de implicados
Según esta hipótesis, habría dos personas detenidas desde que se cometió el atentado; cinco abatidos a tiros por la policía en el atropello de Cambrils; otro muerto en la explosión y, al menos, otra persona huida que sería el autor material del atropello.
En total nueve personas de las que podría encontrarse otras conexiones o desembocar en más detenciones. Una gran cantidad de implicados que descartaría automáticamente la hipótesis de un lobo solitario.