En España han anidado diferentes bandas callejeras, importadas en su mayoría de las calles de América Latina, siendo las más conocidas por sus crímenes Los Latin Kings y Ñetas, que en Madrid sostuvieron sangrientos enfrentamientos hasta que la acción policial los debilitó. Después, ocupando el vacío de poder en las calles, aparecieron otros grupos, que han sido más minoritarios que los citados.
Dominican Don´t Play (DDP): Desde la caída de la cúpula de los Latin King son la banda más activa y organizada. De hecho, según los datos de la Fiscalía General del Estado, forman la pandilla que más delitos y de mayor gravedad ha cometido en los últimos años.
Latin King: Fue la organización más conocida desde 2005. Sin embargo, desde que la cúpula de esta banda fuera juzgada por asociación ilícita en octubre de 2010 su fama y su »poder» en la calle se desplomó. En los últimos años han sido la pandilla con mayor número de detenidos pero no han cometido delitos graves.
Ñetas: Siete miembros de este grupo fueron detenidos el pasado 3 de julio de 2012 por el asesinato de un Latin King en el madrileño barrio de Vallecas. Este fue uno de los últimos homicidios entre bandas latinas y una prueba de lo que los datos globales aseguran. Los ñetas son una de las bandas que más ha crecido en los útlimos años y sus actuaciones han sido, a menudo, más violentas que las de sus rivales.
Trinitarios: Son minoritarios y, fundamentalmente, se mueven por los barrios del sur de Madrid. No por ello son menos peligrosos, de hecho ya han cometido dos asesinatos en España. En los últimos años, además, han sido detenidos 50 de ellos y la mayoría de los delitos que se les achacan son por robo o lesiones.
Traviesos: Es una de las bandas más emergentes aunque aún es minoritaria. En 2011 se vieron envueltos en dos casos de lesiones y otro de robo (de hecho, dos de sus miembros acabaron en la cárcel). La Fiscalía lleva un par de años advirtiendo sobre su asentamiento aunque hasta la fecha no constan sucesos graves relacionados con esta banda.
Blood 901: Es otra de las nuevas bandas que ya ha cometido agresiones y de los que ya se ha detenido a siete miembros. Aunque su número va en aumento en barrios humildes, es uno de los grupos más controlados por la Policía.