Commerzbank necesita 2.500 millones y ha tenido que pegar un tijeretazo del 55% al precio al que colocará las acciones de su ampliación de capital. Los inversores no están dispuestos a pagar ni un céntimo más de los 4,50 euros a los que llevará a cabo la operación. No se trata de un banco español, italiano o griego, sino de la segunda entidad financiera alemana, receptora de ayudas públicas y que ha perdido 94 millones de euros en el primer trimestre del año.
El descuento que aplicará Commerzbank ha superado incluso las previsiones de los expertos más pesimistas. ¿Qué significa? Que no hay apetito alguno por el sector bancario salvo que los precios sean de saldo.
Durante la presentación de resultados realizada la semana pasada, el banco germano lanzó al mercado un mensaje muy claro: 2013 será un año marcado por la presión sobre los ingresos, por el crecimiento de las provisiones por el aumento de la morosidad y por un alza de los costes para cubrir el deterioro de las inversiones.
¿Les suena? Es lo mismo que escuchamos cada día a nuestros banqueros españoles de cabecera, sólo que en boca del segundo banco de la primera economía del mundo. La tremenda rebaja de precio que exigen los inversores es la demostración más evidente de que los problemas de la banca europea no pueden ser más globales.
La última rebaja de los tipos de interés en Europa se va a comer un poco más los márgenes de las entidades financieras y la caída de la actividad económica en Europa dibuja un escenario sin apenas visibilidad para el sector. Todo eso ya lo ha sufrido Commerzbank, que con los 2.500 millones de la ampliación va a devolver ayudas públicas.
La operación será un punto y aparte, como en España han podido comprobar bancos como el Popular que en diciembre del año pasado tuvo que salir al mercado para conseguir a la deseperada los 2.000 millones de euros que le permitieron salir en solitario. Los analistas alemanes no paran de recordar que los resultados del primer trimestre de Commerzbank no dan pistas fiables sobre una mejora de las grandes cifras del banco este año.
Dicho de otra forma, la evolución del negocio bancario es una enorme incógnita. Las condiciones de la ampliación de Commerzbak no son sino el reconocimiento de la tremenda paradoja que vive Europa, Alemania incluida. Mientras el índice DAX germano está en máximos históricos, uno de sus grandes bancos tiene que tirar el precio hasta niveles insospechados para atraer la atención de los inversores.