La subasta de la electricidad CESUR, se celebra trimestralmente y de su resultado depende un 45% de la tarifa de último recurso (TUR) de la electricidad. El 55% restante de esa tarifa lo fijaría el Gobierno a través de los peajes, que en teoría contemplan el coste de generación, transporte o distribución.
La subasta invalidada por la CNMC concluyó con un precio de 61,83 euros el megavatio/hora. Un 26% más que los 47,58% euros por megavatio de la anterior subasta, celebrada en septiembre.
PRIMER AVISO: EL MERCADO MAYORISTA MARCÓ UN RÉCORD DE 10 AÑOS EN DICIEMBRE
Ningún agente en el mercado se sorprendió ayer con el resultado de la subasta. La CESUR, en realidad, únicamente ha sido un paso más en la escalada de precios que se ha producido en el mes de diciembre en el mercado mayorista. Según fuentes del mercado, este mes de diciembre ha registrado precios récord. El 8 de diciembre, de hecho, se cerró con el precio más alto, en los últimos diez años en ese mercado.
De hecho, hace días que los incrementos eran noticias. El mercado mayorista, ‘pool’ o ‘spot’, es un mercado físico en el que a diario se marca el precio y la electricidad del día siguiente. Por lo tanto, a Soria no debió extrañarle tanto la subida del 11%.
Para los expertos era lógico que la subasta CESUR registrara un incremento importante, si el cierre anterior del mercado mayorista era de 58 euros megavatio. Apuntan a que la investigación de la CNMC debería girar en torno a los motivos del alza mensual.
LA SUBASTA ON LINE, QUE ES CONFIDENCIAL, MARCA EL PRECIO
Con todo, la subasta CESUR es altamente especulativa. Se realiza ‘on line’ y la identidad de sus participantes es confidencial durante los tres meses sucesivos a su celebración.
ENDESA, GAS NATURAL, FENOSA, IBERDROLA Y E.ON, OBLIGADAS A COMPRAR EL 60% DE LA ENERGÍA EN CESUR
A la subasta CESUR acuden por un lado acuden empresas generadoras de energía, españolas y europeas; y por otro, las compradoras, que son las cinco comercializadoras de último recurso: Endesa, Gas Natural, Fenosa, Iberdrola y E.On. Esas comercializadoras están obligadas por ley a adquirir en CESUR el 60% de la energía que suministran en el mercado a tarifa.
EL MINISTERIO MARCA UN PRECIO DE SALIDA
La subasta es descendente. Es decir hay un precio de partida que fija el ministerio de Industria (en la última fue de 70 euros, megavatio/hora), y el precio baja en función de las ofertas. La mejor forma de manipular el precio sería retirando oferta del mercado.
INTERMEDIARIOS QUE NEGOCIAN EL PRECIO DE LA ENERGÍA
En realidad, es una compra a futuro. Refleja el precio que se espera marcará en el mercado mayorista diario cuando acudan los comercializadores. Los vendedores cubren el riesgo. Si en el mayorista se paga más alto, lo asumen, pero si el precio es más bajo, ganan.
De ahí que participen numerosos agentes intermediarios, empresas de trading. Según publica el diario Cinco Días, un 50% de los participantes son entidades financieras (Morgan Stanley, Goldman Sachs, Deutsche Bank), otro, 40% eléctricas europeas (EDF, EGL), y un 15% eléctricas españolas. Según fuentes de ese mismo diario, ayer, Iberdrola habría ofertado un 4% de lo vendido, mientras que Endesa, no participó.
Los expertos y agentes del sector también coinciden que hay varios factores que podrían haber influido en la escalada de precios: la falta de viento que ha rebajado la producción eólica un 43%, la parada de tres centrales nucleares, la sequía por la que se produce menos energía hidroeléctrica, la venta de más gas a Europa. Además del factor estacional que conlleva una bajada de temperaturas.
MÁS SUBASTAS PARA FRENAR LA ESPECULACIÓN
Con todo, y mientras el Ejecutivo baraja soluciones, el sector lleva tiempo asegurando que para frenar la especulación de CESUR habría que empezar por realizar las subastas con más frecuencia. Al no ser una sola, trimestralmente, el resultado sería más fácil de equilibrar.