El ministerio de Industria, Energía y Turismo ha remitido un borrador a la Comisión Nacional de la Energía, en el que se contempla que los usuarios con consumos superiores a la medida podrían ser penalizados con tarifas mayores. El objetivo del ministerio sería «incentivar el consumo responsable».
Así, según este borrador que todavía no ha sido aprobado, los usuarios con consumos superiores a la media serían los más penalizados con nuevos recargos, en los que el precio del kilovatio/hora puede aumentar un 700%. La medida y los nuevos términos de progresividad podrían aplicarse a partir del 1 de enero de 2013.
En principio, no se tendría en cuenta la renta de los usuarios a la hora de aplicar esta penalización, aunque no afectaría a aquellos que tengan »bono social» por una contratación de menos de 3 kilovatios (kW) de potencia. A este grupo no les afecta porque se establecen cinco tramos de consumo a partir de esos 3 kilovatios (kW).
En realidad, el bono social contempla cuatro colectivos: los clientes con una potencia contratada inferior a 3 KW; los pensionistas con prestaciones mínimas; las familias numerosas y los hogares en los que todos sus integrantes se encuentren en situación de desempleo.
El ministerio no ha aclarado si los pensionistas, las familias numerosas y los hogares con todos los integrantes en paro deberán entrar en estas nuevas tarifas ó estarán excluídos.
Las diferencias de precios entre el primer y el último tramo sería de hasta el 700%. Por ejemplo, según el diario El Economista, un consumidor con una potencias contratada de hasta 7 kilovatios (kW) pasaría de pagar 0,00138 euros por kilovatio hora (kWh) a 0,01104 euros.
En la memoria ministerial, se indica que el objetivo de los nuevos peajes progresivos es «establecer medidas que incentiven el consumo responsable de energía a través de la introducción de una progresividad en los precios de los peajes de acceso».
REPARTO DE TRAMOS
Los tramos de consumo establecidos, según el borrador, parten de los 3 kilovatios (kW) y hasta los 10 kW. Habría siete perfiles de consumidor, cada uno de ellos con cinco tramos en función del consumo. El primero va de 3 a 4 kW, el segundo de 4 a 5 kW, y así sucesivamente, hasta los 10 kW.
En el caso de entre 3 y 4 kW, el consumidor pagará 0,00138 euros por kilovatio hora (kWh) cuando consuma entre 190 y 224 kWh, así como 0,00276 euros para el tramo entre 225 y 259 kWh, 0,00483 euros para el comprendido entre 260 y 293 kWh, 0,00759 euros para el comprendido entre 294 y 328 kWh y 0,01104 para consumos entre 329 y 363 kWh.
El precio del kilovatio hora es el mismo en los siguientes perfiles de consumo, si bien las horquillas son superiores. Como ejemplo, el consumidor medio español, que tiene entre 4 y 5 kW contratados, entrará en el modelo de tramos tras consumir 247 kWh, y superará el primer escalón a los 292 kWh, el segundo a los 337 kWh, el tercero a los 382 kWh y el cuarto a los 427 kWh.
CONGELA LOS PEAJES ELÉCTRICOS
En todo caso, el ministerio congelará los peajes eléctricos, como había anunciado el ministro José Manuel Soria, de forma que la revisión de la tarifa en enero dependerá únicamente del resultado de la subasta eléctrica del próximo 21 de diciembre. La previsible subida en esta puja tendrá un peso cercano al 50% sobre la tarifa final.
Industria señala en la memoria económica que la subida «nula» de peajes no provocará «alteraciones sobre el IPC» ni «por tanto sobre la competitividad de la economía española».
RESPIRO PARA LOS AYUNTAMIENTOS
Por otro lado, se volvería a dar un año de plazo a los consumidores con potencias superiores a 10 kilovatios (kW) para la firma de un contrato de suministro en el mercado libre.
Estos consumidores, generalmente administraciones públicas y empresas, disponían de plazo hasta el 31 de diciembre de este año para pasar al mercado libre si no querían exponerse a recargos cercanos al 20% en su recibo.
Esta exigencia se había convertido en un problema para algunas administraciones públicas, especialmente ayuntamientos, que se encuentran acuciados por la falta de recursos económicos y que tienen mucha dificultad para encontrar un suministrador eléctrico a precio competitivo.
EL BONO SOCIAL, A LA TARIFA
Además, Industria ha recogido en sus previsiones de costes del sistema eléctrico las sentencias del Tribunal Supremo en las que se exime a las eléctricas de financiar el mecanismo del bono social. De esta forma, será los consumidores eléctricos, mediente la tarifa, los que costeen esta medida apoyo a colectivos vulnerables.
En concreto, Industria ha recogido un coste de 161 millones de euros imputable a la tarifa de 2012 relacionada con el bono social, así como de 187 millones de euros para el ejercicio 2013.