El BCE mantiene los tipos en el mínimo histórico del 0,25% aunque un mes más no descarte, en palabras de su presidente, “tomar medidas más adelante”. De momento se conforma con el anuncio. Mario Draghi, ha sido sin embargo, más claro de lo habitual en la rueda de prensa posterior a la reunión de Gobernadores. El italiano ha insistido en que «no se excluye facilitar más, la política monetaria actual» pero «después de ver las proyecciones que se publicarán en junio» cuando “habrá más información disponible” porque se publicarán datos de inflación y proyecciones macroeconómicas.
El presidente, que tiende a cultivar cierta ambigüedad en sus ruedas de prensa, aseguró hoy que estaría «cómodo» con el hecho de poder adoptar medidas «en la próxima ocasión». Según Draghi, “el consejo de Gobierno no está resignado a tener una baja inflación en la eurozona durante un tiempo prolongado y tiene en cuenta que el ritmo de recuperación es bastante lento y hay riesgos en torno a la demanda global, geopolíticos y cambiarios”, ha afirmado el italiano.
UCRANIA, DEFLACIÓN, DIVISAS, SON LOS PELIGROS PARA LA RECUPERACIÓN
Es decir, se mantienen a la espera mientras reconocen varias amenazas a la todavía débil recuperación. Estos son: la baja inflación con un “limitado” peligro de deflación, el euro fuerte o el conflicto de Ucrania.
Sin embargo, reconoció que «cuanto más largo es el periodo de tiempo con inflación baja, más importante es el riesgo”. Especialmente, ha reconocido que la combinación de baja inflación y euro fuerte es peligrosa. «El tipo de cambio es causa de una gran preocupación para el objetivo de la estabilidad de los precios que habrá de afrontar”. «La apreciación del euro en un contexto de inflación baja y con actividad económica átona es una razón de preocupación real» y de «seria preocupación», dijo Draghi.
La tasa de inflación en la zona euro repuntó en abril hasta el 0,7% desde el mínimo del 0,5% registrado en marzo, por el efecto alcista de la Semana Santa. Sin embargo, el dato se situó pese a este repunte una décima por debajo de lo que esperaba el mercado.
ESPAÑA HACE PROGRESOS PERO DEBE MANTENER LAS REFORMAS
Con todo, constata una “estabilización de las condiciones crediticias para las empresas” y mejoras en los países de la periferia como España. El presidente del BCE ha recalcado que gracias a las medidas estructurales, se permiten “apreciar señales claras de recuperación y las proyecciones económicas no son malas», aunque “no hay que relajarse sobre los éxitos pasados”.
LOS FACTORES QUE REBAJAN LA PRIMA DE RIESGO
El presidente del BCE también ha sido interrogado por el interés de los inversores en deuda periférica. Uno de los motivos por el que los intereses de la deuda española se han rebajado a mínimos históricos y la prima se ha relajado. Draghi, ha admitido que existen “factores geopolíticos”, en referencia a la huida de inversores de Rusia. También lo ha achacado al “aumento de riesgos en otros lugares del mundo relacionados con un cambio de su política monetaria”, es decir, las turbulencias de los países emergentes.
REAFIRMA LA INDEPENDENCIA DEL BCE FRENTE A LAS PRESIONES PARA ACTUAR
También ha reiterado la independencia de la institución, preguntado por las presiones francesas en torno a la cotización del euro y los ‘consejos’ de instituciones como el FMI. “En los últimos días hemos recibido muchos consejos de políticos e instituciones, sobre tipos de interés, tipos de cambio pero también, el exceso de liquidez. Lo agradecemos pero por el tratado de fundación, somos independientes. Si esto se ve como una amenaza a nuestra independencia, el daño que se puede causar a nuestra credibilidad es importante”.
Organizaciones internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) han pedido al BCE que recorte los tipos de interés hasta cero y adopte medidas extraordinarias adicionales, que podrían incluir compras de deuda.
El Producto Interior Bruto (PIB) de la zona euro experimentó en el cuarto trimestre de 2013 una expansión del 0,2% respecto a los tres meses anteriores, cuando había registrado una expansión del 0,1%, según la tercera estimación del dato por parte de Eurostat, que revisó este miércoles una décima a la baja su anterior lectura sobre la actividad económica en la región.