En el Foro de Bancos Centrales celebrado en la localidad portuguesa de Sintra, Draghi recalcó que el BCE tiene las herramientas necesarias para hacer que la inflación en la zona euro vuelva a situarse cerca, pero debajo, del 2%, frente al 0,7% de abril.
Asimismo, el presidente del BCE añadió que los ajustes de precios en ciertos países de la zona euro corrían riesgo de desacelerarse y luego estancarse.
«Somos conscientes de los riesgos de un periodo demasiado prolongado de baja inflación», insistió.