Los bancos de la eurozona han pedido 489.000 millones de liquidez al BCE. Han superado todas las expectativas ya que se barajaban cifras en torno a los 250.000 millones e incluso los 400.000 millones de euros.
523 entidades europeas han acudido a la »subasta» de crédito ilimitado del BCE. La operación ha sido un éxito.
La inyección de liquidez del BCE, es la primera de dos operaciones con vencimiento a tres años, ilimitada y con un interés bajo, que el BCE realiza para garantizar liquidez a largo plazo en la eurozona. La segunda será el próximo febrero.
La pregunta crucial es en qué medida el BCE va a facilitar la financiación de Estados con dificultades a través del canal bancario.
Algunos expertos consideran que es posible que algunos bancos tomen prestado el dinero del BCE a condiciones muy baratas para comprar deuda soberana de países periféricos con vencimientos a dos o tres años, que ofrece una rentabilidad mucho más elevada.
Es una operación de «carry trade» (tomar prestado barato para invertirlo donde la rentabilidad es mayor).
Una hipótesis poco clara, teniendo en cuenta que muchos bancos europeos, sobre todo los más grandes, actualmente reducen sus exposiciones a la deuda soberana tras las pérdidas que han sufrido a causa de la crisis Griega.
Tampoco parece evidente, que la liquidez que obtengan los bancos se traslade en un mayor flujo de crédito para empresas y particulares. Los bancos deben hacer frente a un número importante de vencimientos en el primer trimestre de 2012, y actualmente su máxima preocupación es obtener liquidez »para pagar».
Según el BCE, en el primer trimestre del año habrá vencimientos por 230.000 millones, en la totalidad del año podrían ascender a los 600.000 millones, una carga muy pesada para el sistema financiero.