El ex piloto de Fórmula 1, Michael Schumacher ha salido del hospital, al menos así lo adelantaba en su edición digital el periódico alemán »Bild». »Schumi» deja el Hospital de Lausana, donde se encuentra internado desde el pasado mes de junio, para continuar en su casa de Suiza la recuperación del grave accidente que sufrió las pasadas navidades, y que le mantuvo casi seis meses en coma.
La familia ha emitido un comunicado según el cual al heptacampeón mundial de Fórmula 1, a Schumacher aún le queda «un largo y difícil camino en su proceso de recuperación». La familia ha perdido, como lleva haciendo desde el accidente, respeto y discrección en lo referente al estado de salud del ex campeón de Fórmula 1.
El alemán llevaba ingresado 254 días -entre Francia y Lausanna- desde su accidente de esquí el pasado 29 de diciembre que le produjo un severo traumatismo en la cabeza que obligó a los médicos a mantenerle en coma inducido. Ya hace días se habló de la posibilidad de que el piloto fuera dado de alta en navidad, pero parece que los acontecimientos se han acelerado.
Schumacher debe seguir ahora un complejo proceso de rehabilitación para recuperar la movilidad y el habla, aunque no se sabe con certeza cuál es su grado de mejoría. Las ventajas de estar en casa son principalmente afectivas y emotivas. Abandonar un hospital y regresar a su entorno siempre supone una mejora para pacientes con lesiones cerebrales como las que se produjo Schumacher.