En el año 2006, René Wegner, un estudiante de ciencias del deporte de la universidad alemana de Saarbrücken, tuvo la idea de comenzar a golpear el balón con la cabeza en una mesa de ping pong tras no poder ocupar la pista de fútbol porque estaba ocupada. Así, casi una decada más tarde, la práctica de este deporte, que mezcla tenis de mesa y fútbol y se denominó Headis, crece a un ritmo desmesurado por todo el mundo.
Este juego, que recibe el nombre de la tradución en ingles de tenis de mesa (table tennis) y cabeza (head) tiene una particularidad: sólo se puede golpear el balón, algo más pequeño que uno de fútbol, con la testa. Las reglas son fáciles: el partido se juega al mejor de tres sets que son al mejor de 11 puntos. Este formato encandiló primero a los compañeros de René en la universidad, donde se convirtió en parte del programa deportivo, y después se extendió rápidamente por Alemania. En 2008 se fundó algo así como un ránking ATP compuesto por 10-12 torneos en Alemania donde hombres y mujeres, que juegan con un pseudónimo, luchar por ser primeros en la clasificación general. En 2009 había más de 400 participantes de todas las partes del mundo. Un nuevo deporte lucha por ser olímpico.