La ciudad de Manchester llora por City y United. Dos de los equipos más potentes de Europa se han quedado fuera de la Champions. El equipo que dirige Mancini, pese a su victoria ante el Bayern, no estará entre los dieciseis mejores conjuntos de Europa. Lo mismo pasa con su vecino, el United del legendario Sir Alex Ferguson, que no pudo puntuar en Basilea.
El Manchester City jugaba por primera vez la Liga de Campeones después de mucho tiempo y lo hacía con jugadores de relumbrón. El jeque se había gastado muchos petrodólares en formar un equipo, líder de la liga inglesa, con grandes estrellas como David Silva, Sergio Agüero, Nasri o Touré Yaya. Todo ese gasto se ha visto despilfarrado a las primeras de cambio. Jugadores como el Kun Agüero, que dejaron su anterior equipo por triunfar en Europa, se ven abocados a jugar una competición menor como es la Europa League y despedirse del sueño de alzarse con la Copa de Europa.
Poco tiene que decir su máximo rival y vecino, el Manchester United. El equipo de los diablos rojos se ha vuelto a quedar fuera de la liguilla de grupos, como hiciera en temporada 2006, con Villarreal y Benfica en su cuadro. El equipo que dirige Sir Alex Ferguson ha sido un clásico en el tramo final de la máxima competición continental de los últimos años.
Este año se cumplen 25 años de Sir Alex en el banquillo del United a la vez que el escocés cumple 75 primaveras. Un duro palo para la afición del Manchester que sólo podrá ver a su equipo en la Europa League. El grupo del United era a priori asequible para los »red devils» ya que contaban con Basilea, Benfica y Otelul Galati. Varios empates en Old Traford y fuera de casa han condenado al equipo inglés a jugar la segunda competición.
Tal y como se han dado los resultados y las eliminaciones de grandes equipos en la fase regular del torneo, la Europa League se torna en una competición más que deseable.