En un comunicado, el sindicato ha explicado que la Subdirección General de Inspección Educativa ha remitido una circular a los centros educativos la semana pasada donde se exigen unas nuevas directrices para la entrega de horarios del profesorado de los Institutos públicos madrileños.
Según el sindicato, esto significa que los horarios se han de rehacer casi tres meses después del inicio del curso escolar con el único objetivo de hacer «desaparecer por la fuerza todo signo de disconformidad o desacuerdo» con estos documentos firmados por los profesores.
«Para alcanzar este objetivo se están utilizando todo tipo de métodos coercitivos e intimidatorios usando, en última instancia, la amenaza de que se harán listados con aquellas personas que insistan en mantener la fórmula »no conforme»», ha señalado la organización sindical.
El sindicato ha recordado que «España es un Estado de Derecho» y ha considerado que con estas actuaciones «se están vulnerando el derecho a la opinión y el derecho a la libertad de expresión además de hacerse a través de conductas coercitivas, amenazantes y, en algunos caso, intimidatorias».
Por ello, CC.OO. exige a Educación que rectifique, que se «asuma la disconformidad generalizada con las instrucciones y los horarios y se abandone la persecución a los equipos docentes y directivos». «Es irresponsable que para lavar la imagen política de los altos cargos del Gobierno regional se obligue a acatar órdenes que vulneran la legalidad vigente», ha apostillado.
Así, además de tramitar las reclamaciones individuales de los horarios de los profesores que así lo deseen, el sindicato llevará a cabo las acciones legales que considere necesarias contra aquellas actuaciones que considere puedan ser constitutivas de delito, «tal y como se ha hecho hasta el momento».
Desde la Consejería de Educación han explicado a Europa Press que esta carta se debe a una simple cuestión «técnica» y que se les permite a los docentes y equipos directivos que muestren su conformidad o disconformidad en el espacio habilitado para ello en el documento con el fin de no alterar el papel sobre el que trabajan los inspectores.