Aunque la lipotransferencia, que consiste en extraer la grasa de una zona del cuerpo e implantarla en otra, es una técnica utilizada desde hace tiempo para el aumento localizado de volumen tanto en el cuerpo como en el rostro, ahora, gracias a los avances en medicina estética, se consiguen resultados extraordinarios, al utilizar tejido graso enriquecido con células madre y factores de crecimiento.
Como afirma la doctora Gemma Pérez Sevilla, Directora del Departamento de Medicina y Cirugía Estética Facial del Instituto Médico Láser, la grasa enriquecida presenta importantes ventajas: “mejor control de volúmenes y de resultados, mayor duración y supervivencia del injerto, menor traumatismo, recuperación mucho más rápida y mejoría en el aspecto de la piel”.
Sus indicaciones son tanto estéticas como reparadoras: el tejido graso extraído, cinco veces más rico en células madre que el cordón umbilical o la médula espinal, se extrae generalmente de la zona abdominal, y se puede utilizar tanto para recuperar volúmenes perdidos en el rostro (donde los tejidos descienden a lo largo de los años), para armonizar el óvalo facial, o para el aumento de mamas, glúteos o gemelos, entre otras aplicaciones.
A día de hoy, el Instituto Médico Láser, en colaboración con la Clínica La Milagrosa, es el único centro nacional de medicina y cirugía que realiza lipotransferencias con auténticas células madre.