El hombre de unos 70 años que se había atrincherado en su casa en Ejea de los Caballeros (Zaragoza) ha fallecido este jueves en un intercambio de disparos con agentes de la Guardia Civil, a los que ha recibido a tiros cuando han abierto la puerta de su casa. Uno de los agentes está herido grave y está siendo atendido en el lugar.
Según han informado a Europa Press fuentes del Instituto Armado, los agentes han intentado negociar con él durante toda la noche, sin éxito, y han vuelto a intentarlo a las 8.00 horas de este jueves.
Finalmente, la Guardia Civil ha decidido entrar en la casa y el hombre los ha recibido a tiros nada más abrir la puerta. Los agentes han respondido y el hombre ha fallecido en el tiroteo.
Este hombre, cazador de unos 70 años, se atrincheró el miércoles en su casa después de disparar con una escopeta al novio de su hija, que recibió dos impactos de bala en el hombro.
Los agentes han sido «muy meticulosos y pacientes con este señor», han resaltado las fuentes de la Guardia Civil, que ha mantenido desplegados a numerosos efectivos en esta localidad, capital de la comarca de las Cinco Villas.
El asalto de la vivienda ha sido protagonizado por agentes pertenecientes a la Unidad Especial de Intervención (UEI) de la Guardia Civil, uno de los cuales esta herido grave y ha sido trasladado a un hospital de Zaragoza.
El suceso se inició este miércoles por la tarde en Ejea de los Caballeros, donde al parecer el hombre ahora fallecido disparó al novio de su hija, de 50 años, que resultó herido grave y fue trasladado al Hospital Clínico de Zaragoza, donde permanece ingresado en la UCI.
Herido grave
La víctima de los disparos de ayer por la tarde, Rafael L., resultó herida y fue trasladada hasta el Hospital Clínico de Zaragoza. Una bala le produjo un orificio de entrada y salida en la clavícula.
Una vez disparó a la pareja de su hija, Pilar C., se atrincheró en su vivienda, lanzó varios disparos hacia la Guardia Civil, alcanzando a uno de los agentes que resultó ileso gracias al chaleco antibalas. A pesar de ello, fue atendido en el Centro Médico de Ejea y, posteriormente, trasladado al Hospital Clínico de Zaragoza.
Por el momento, el domicilio del fallecido permanece acordonado al igual que las calles colindantes y de acceso a la zona de La Llana.
La Benemérita continúa con la investigación para esclarecer los hechos aunque entre los vecinos de Ejea de los Caballeros se repite la hipótesis de que la hija del atrincherado sufría malos tratos por parte de su pareja.