Todos los ojos estaban en Dos Hermanas. Y lo cierto es que Podemos ha vuelto a demostrar que tiene tirón. Es cierto que como siempre ha habido polémica: Pablo Iglesias habló de reventar el reciento con 30.000 personas.
No llegó a la mitad, chirigotas incluidas, que quiera uno que no son más entrentenidas que los discursos. Podemos justificó pasar de 30.000 a la mitad de entradas disponibles por cuestiones de seguridad.
El alcalde de Dos Hermanas, Francisco Toscano, que no hay que olvidar que es del PSOE desde hace 30 años, deja claro que en ese recinto fue dispuesto a la Junta Electoral de Zona (JEZ) con una capacidad de 30.000 personas y ha celebrado actos con entre 25.000 y 30.000 personas.
La formación de Pablo Iglesias, de su lado, defiende que el aforo máximo ha sido estipulado según criterios técnicos y de seguridad.
Durante la campaña, los dirigentes de Podemos han llamado insistentemente a «reventar» este velódromo de Dos Hermanas en el mitin de cierre de campaña, toda vez que el recinto ha acogido tradicionalmente los actos más multitudinarios del PSOE andaluz, que ostenta el gobierno de la Junta de Andalucía.
El secretario general del partido, Pablo Iglesias, y la candidata de Podemos a la Presidencia de la Junta de Andalucía, Teresa Rodríguez son las estrellas, aunque no siempre hayan estado de acuerdo.
La Ejecutiva manda mucho, y el crowfunding funciona lo justo, por mucho que se promocione.
Ya a las 19,15 horas, el acto echaba a andar con las actuaciones de la comparsa de Los Millonarios y la chirigota Ahora es cuando se está bien aquí, en cuyas letras no han faltado alusiones al «coleta», en referencia a Pablo Iglesias, a la polémica relativa al aforo del recinto y a aspectos del debate político como «los sobres», en referencia a la presunta contabilidad paralela del PP.
Todo ello animado por sucesivos llamamientos al ‘grito de guerra’ de Podemos: «¡Sí se puede!». Antes tanto Pablo Iglesias como Teresa Roríguez recorrieron las calles de Cádiz y se encontraron de todo, desde gritos de Venezuela a Sí se puede. Hay quien quería un selfie o quien pedía que le cortaran la coleta. Lo que es una campaña. Eso sí Iglesias dejó su mensaje social: «Nos piden que seamos humanos, que convirtamos la Administración pública en un sitio donde haya humanidad y empatía con el ciudadano que llega porque se ha visto en la coyuntura de que le cortan la luz y el agua y lo echan de su casa».
Y también su mensaje político al PSOE: «Quienes adelantaron las elecciones porque tenían miedo a Podemos seguramente no sabían que teníamos la capacidad de dar respuesta en tan poco tiempo y con una campaña tan participada, tan bonita y con tanta presencia en todos los rincones de Andalucía. Queda claro cuál es su rival.