El bitcoin ha vuelto esta semana a alcanzar máximos históricos. La divisa virtual por excelencia se ha disparado un 700 % durante 2017 hasta los 8.270 dólares de este jueves. Casas de análisis, además de sus habituales detractores, han vuelto a alertar de un hipotético pinchazo de la burbuja “por su alta volatilidad”. Pero ni inversores ni multinacionales financieras han perdido la confianza en la criptomoneda más potente de todas.
El asunto ha adquirido tal magnitud que los grandes de Wall Street ya están involucrados. Los 16,7 millones de unidades de bitcoins en circulación se tasan en unos 110.000 millones de euros. La criptomoneda ha experimentado un ascenso meteórico desde el pasado mes de enero, cuando superó los 1.000 dólares por unidad, y se ha convertido en un producto de inversión muy atractivo. Sin embargo, su volatilidad -con tres grandes caídas en 2017- es el principal argumento para una parte de los analistas del sector financiero que auguran un colapso del sistema.
No obstante, la mayoría de los usuarios todavía confían en la evolución de esta divisa virtual.
“Comencé en gran parte por curiosidad, como aficionado a la tecnología que soy, y, sobre todo, por motivaciones políticas. El objetivo principal de las criptomonedas es devolver a la gente la soberanía sobre sus bienes y liberarlos de decisiones intervencionistas”, afirma Miguel Ángel Sánchez; que opera con bitcoins prácticamente desde su nacimiento.
Este usuario de bitcoin explica a teinteresa.es que no cree que el ascenso de su valor vaya a finalizar en el pinchazo de la burbuja, aunque sí reconoce que se han dado “euforias especuladoras” en el último año. “Todavía está en fase de aceptación popular y alcanzar la estabilidad de la que gozan otras divisas tradicionales llevará tiempo”, explica.
“Las subidas y bajadas son algo habitual»
Sánchez considera que durante este periodo de transición la criptomoneda sufrirá “algún tropezón” más como el ocurrido en la primera semana de noviembre “cuando la cotización bajó casi 1.000 dólares de golpe”.
El punto de vista de Sánchez también lo comparte el mayor operador de divisas del mundo. CME Group comenzará a ofrecer operaciones con bitcoins durante el próximo mes de diciembre. “Seremos el hogar de este nuevo vehículo y proporcionaremos a los inversores una mayor transparencia, análisis de los precios y los riesgos de invertir en esta criptomoneda», anunció en octubre Terry Duffy, presidente y consejero delegado de la compañía.
El bitcoin está empezando a ser un producto de inversión reconocido. Óscar Domínguez, CEO de Territorio Bitcoin, recuerda que su primera compra la hizo a un precio de 304 euros y un tiempo después llegó a bajar hasta los 148 euros. “Las subidas y bajadas son algo habitual y se suceden desde, al menos, septiembre de 2014”, puntualiza.
El experto subraya que todo producto de inversión está expuesto a un colapso en un momento determinado, pero estima que esto no va a ocurrir en el corto plazo: “Hace unos días tanto el bitcoin como su capitalización bajaron de forma significativa y a las pocas horas comenzó su ascenso de nuevo”.
En este sentido, la volatilidad reciente se debe a un repunte de las personas que han cambiado a otras monedas virtuales, como el bitcoin cash. Este ‘hermano pequeño’ del bitcoin ofrece una mayor velocidad de transacción a menor coste.
La burbuja de las criptomonedas y, en especial la del bitcoin, está a la orden del día desde antes del verano en las casas de análisis, pero su capitalización en el mercado no ha parado de subir. ¿Tocará los 10.000 dólares antes del fin del año? Esa es la pregunta que todos se están haciendo”, se cuestionaba el popular analista de ForexTime, Lukman Otunuga.