La visita del expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero a Cuba, donde ayer mantuvo un encuentro con el presidente Raúl Castro, ha provocado una agria polémica entre el Gobierno y los socialistas.
Según trascendió tras declaraciones del mandatario cubano al diario estatal «Gramma», en el encuentro, calificado por el Ejecutivo de Castro de «cordial», se abordaron «temas de mutuo interés de la agenda regional e internacional» y se habló de «las relaciones históricas que unen a ambas naciones». Zapatero estuvo acompañado por el exministro de Asuntos Exteriores Miguel Ángel Moratinos, artífice, en 2010, del proceso de diálogo con el Gobierno cubano que permitió la liberación de más de medio centenar de presos políticos en la Isla.
El Gobierno ha respondido a este viaje en palabras del ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, quien ha considerado la visita como «inoportuna», llegando a calificarla de «acto de deslealtad».
Según Margallo, Zapatero y Moratinos no informaron previamente al Ejecutivo de su intención de viajar a la isla, por lo que el Gobierno se enteró cuando la Embajada en La Habana tuvo conocimiento de su desplazamiento. Es decir, cuando se solicitó a la misión diplomática el correspondiente permiso de armas para sus escoltas.
Según fuentes próximas al expresidente, Rodríguez Zapatero emprendió su viaje a Cuba y a Bolivia sin tener cerrados los encuentros con los presidentes de ambos países, aunque sí se informó al Gobierno, en concreto a través de varios correos electrónicos remitidos directamente desde la oficina del expresidente a la directora adjunta del gabinete del ministro de Exteriores y Cooperación.
Según estas mismas fuentes, incluso Moratinos habló directamente con el propio secretario general de Cooperación Internacional para el Desarrollo, Gonzalo Robles, ya que el viaje tiene mucha vertiente de cooperación, sobretodo en Bolivia, donde incluso prevén conceder algún reconocimiento a Zapatero.
Del viaje se tuvo conocimiento público después de que un comunicado el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba informara de la reunión de Castro. También según fuentes socialistas, el expresidente informó al actual secretario general, Pedro Sánchez, de este viaje y de sus intenciones de reunirse con Castro.