A sólo cinco días de que Podemos enfile el proceso clave que los convertirá en partido, los distintos equipos de trabajo ultiman sus propuestas para presentar ante la gran asamblea del próximo fin de semana.
Contra todo pronóstico, la idea de partido que Pablo Iglesias y su equipo, del que forman parte entre otros Juan Carlos Monedero o Íñigo Errejón, presentaron a las bases fue una de las más impopulares en Plaza Podemos, el espacio virtual de debate en el que participan los simpatizantes de la formación.
No gustó su idea de un secretario general, término asimilado a la misma casta que se critica. Tampoco, el recorte en los círculos y en sus posibilidades de acción. Y menos aún que Podemos prescindiese de sus siglas para concurrir a las municipales.
En paralelo a la propuesta del “núcleo duro”, han ido surgiendo otras, de autores no tan mediáticos, y que han logrado un mayor calado. Entre ellas, la de Víctor García (Barcelona, 1981), físico con un Máster en Computación y miembro del Círculo Podemos de Barcelona, ha conseguido que su borrador organizativo “Profundización Democrática” sea el mejor valorado de entre 251 propuestas presentadas.
García, que quedó en el puesto 53 en las primarias de Podemos para las europeas, es ahora uno de los rostros más visibles entre las bases con su defensa de un partido plenamente horizontal y con elementos novedosos, como el carné político por puntos, una tarjeta que, como en el caso de tráfico, irá penalizando las infracciones al reglamento del partido.
Pablo Iglesias decía el otro día que si no gana su propuesta, abandonará el liderazgo, ¿suena a amenaza?
Primero dijeron que abandonaría Podemos, después matizaron y dijeron que dejaría el liderazgo, para relajar, pero entre los equipos de trabajo sí que interpretamos que no debería hacerse ese tipo de declaraciones, más aún teniendo en cuenta que muchas de las propuestas sí que contemplan el encaje del equipo de Pablo Iglesias. Lo que estamos debatiendo es cómo vamos a organizar Podemos, no quienes lo van a liderar. No creo que sea justo hacer eso teniendo en cuenta que la mayoría de propuestas permiten el encaje de su equipo.
¿Las bases no contemplan otro líder que no sea Pablo Iglesias?
Tiene que haber unas elecciones eventuales que decida los distintos cargos ejecutivos de Podemos, aunque es verdad que todo el mundo hasta ahora da por seguro que si se vota en unas elecciones en las que concurra el equipo de Pablo Iglesias sería el equipo ganador. Ahora mismo no hay ningún liderazgo que le pueda hacer sombra, y hasta ahora no nos ha ido tan mal así… pero sí que es cierto que parece estar utilizando un poco el chantaje. Aunque es lo lógico estando como estamos en una negociación, que se basa en posiciones de fuerza.
¿Se han reunido ustedes con el equipo de Iglesias?
Sí, ellos están manteniendo conversaciones con distintos equipos y con nosotros lo hicieron esta semana y es posible que la próxima volvamos a reunirnos.
¿Y qué les proponen en esa reunión? ¿Están a disposición de negociar?
Tuvimos una primera reunión la semana pasada, con Luis Alegre y otros miembros del equipo técnico de Podemos, y como primera reunión ya sabíamos que no ibamos a llegar a propuestas cerradas. Ha sido más bien una toma de contacto para plantear aquellos puntos en los que se cedería y en los que no. Seguramente en una segunda reunión trabajaremos sobre cosas más concretas. Estamos uniendo también varios equipos al nuestro y otros están haciendo lo mismo para presentar una propuesta más unificada a la promotora.
¿En qué puntos les han dicho que no están dispuestos a ceder?
En lo que todo el mundo ve. En la idea de que haya un cabeza único. Esa es probablemente una de las cosas en las que más se resisten, se refugian. Creo que también habrá batalla en el tema de cómo se constituye el consejo ciudadano.
Ustedes proponen que se haga mediante sorteo.
Proponemos una mezcla de mecanismos, para que las bases tengan también posibilidades de elección. Lo que queremos evitar es que el Consejo Ciudadano o la Comisión de Garantías se conviertan al final en parte del aparato. Queremos que sea un ejemplo distinto de cómo se puede hacer un órgano legislativo dentro de un partido, que además fiscalice el trabajo del ejecutivo, algo que tampoco está mal.
Veo que ya hablan de aparato.
No, a lo que me refiero es que lo que nadie quiere es que al final pase lo que pasa en el PP, PSOE, y otros partidos grandes, que todo está conectado entre sí y nadie controla al otro, que la comisión de garantías no hace cumplir los estatutos porque está controlada por los mismos. Esto es lo que nos preocupa y que queremos asegurar que no pase. Y eso depende mucho de cómo se haga la designación de cargos. En ese sentido, el sorteo dentro del Consejo Ciudadano o la Comisión de Garantías te da cierta seguridad para que no todo pueda ser controlado por las mismas personas. Son innovacciones que entendemos necesarias para evitar esos vicios en los que degeneran los partidos tradicionales.
¿Creen que Pablo Iglesias ha hecho una propuesta “a medida” para blindarse?
Sí que está claro que ellos han buscado un encaje para su equipo, pero esto hasta cierto punto no es ni bueno ni malo. Está claro que necesitamos esa punta de lanza, hay consenso en que ellos son los personajes más mediáticos y que son necesarios para entrar en los canales habituales de comunicación. Pero también queremos que exista cierto control, que no devenga en una tiranía de los mediáticos, porque está claro que si eso puede ocurrir, acabará ocurriendo. De momento todo está abierto, aunque tiene que definirse rápido, porque quedan pocos días. Y me imagino que ellos cederán más, porque no van a querer dar esa imagen de blindarse a saco.
Existe entonces un tira y afloja.
Sí, existe. Una negociación es eso e intentas mantener una postura favorable a tí. En esas estamos. Apurando los tiempos hasta que veamos lo que se puede hacer.
¿Ha defraudado entre las bases el borrador de Pablo Iglesias?
Sí, es verdad que el borrador presentado por el grupo promotor genero cierta decepción, se esperaba un poco más. Ahora lo han enmendado en cierta medida. Quizás eso forma parte del juego de la negociación, así que esta semana se verá si finalmente se cierran en banda o ceden un poquito más. Pero sí que te digo una cosa, nosotros decimos que ese discurso de confiar en la gente que Podemos tiene hacia fuera, también hay que practicarlo hacia dentro. Las bases quieren que se confíe más en ellas.
Iglesias justifica el no presentarse a las municipales, entre otras cosas, por el intrusismo que dice existe entre los círculos, ¿está justificado?
Es verdad que existe y sobre todo en los círculos más pequeños. Y esto es un problema, sobre todo de cara a las municipales, porque si esas personas se ponen la etiqueta de Podemos y nada tienen que ver con nosotros se plantea un problema. Es difícil controlarlo. Además, con sólo un caso problemático que surgiera, se magnificaría y utilizaría como arma contra Podemos. Es verdad que ese temor existe y está justificado. Pero el problema es cómo se gestiona. Hay otras propuestas, como un documento de la Complutense, que sí plantea que se pueda ir a las municipales bajo ciertas condiciones.
¿Pero a ustedes les hubiese gustado?
Nosotros sólo planteamos un documento de organización, pero creo que si se puede encontrar una solución que lo permita, dentro de un marco controlado y con unas condiciones muy concretas, se podría contemplar. Lo óptimo sería encontrar un mecanismo que fuese razonable, y con garantías.
¿Serían partidarios de los pactos?
Creo que si tuviera que haber algún parto, tanto pre como postelectoral, tendría que ser refrentado, pactado en un referéndum.
No cierran entonces la puerta.
Si se produce una situación en la que es aconsejable y ese partido cambia su filosofía para amoldarse a Podemos, puede valorarse. Pero sólo si existe una oferta seria y se plantea a las bases. En ningún caso toleraría que fuese un pacto desde arriba, como hacen el resto de partidos.
¿Creen que el programa económico presentado por Podemos para las europeas puede aplicarse aquí?
Creo que merece la pena analizar estas propuestas, que quizás hayan sido presentadas de forma presurosa por la necesidad de tener un programa. Se merecen un análisis. En algunos países, como los nórdicos, se cuenta ya con un sistema de protección social más amplio. En esto estoy de acuerdo con Iglesias. El programa sería muy homologable a cualquiera que jace 30 años habrían firmado los partidos socialdemócratas. No es tan radical como lo pintan.
¿Le gusta el término “casta”?
Sí, y de hecho lo usaba antes de que surgiera Podemos. Era un término que ya estaba en las redes desde el 15-M.
¿Hay algún político que salve de la quema? Iglesias me dijo que a Anguita… (risas) Sí, creo que es acertado Julio Anguita. Y del “enemigo”, el PP, Manuel Pimentel, que fue coherente y dimitió cuando tenía que hacerlo.
¿También compra usted la ropa en Alcampo? La verdad es que no tengo ningún Alcampo cerca. Lo normal, tampoco es que compre mucha ropa habitualmente, y suelo tirar de lo primero que hay.
¿Le cortaría la coleta a Pablo Iglesias? (risas) Qué va, creo que ya se ha convertido en su seña de identidad.