Quizás sea uno de los libros más críticos que se ha escrito contra el expresidente Rodríguez Zapatero. Y más aún, por un socialista. El que fuera primer presidente de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina, vuelve a cargar tintas en “Historia de un despropósito. Zapatero, el gran organizador de derrotas” (Temas de Hoy) contra el que, en su opinión, fue un líder rígido, egocéntrico y rodeado de una oligarquía servil nombrada a dedo. La que dio lugar al “nuevo socialismo”, una política cosmética más pendiente de la propaganda y la imagen que del contenido, que llevó al PSOE a la mayor derrota electoral de su historia y a un callejón sin salida para el partido.
Por eso, no ahorra en calificativos y llega incluso a decir que el presidente estaba “loco”. Textualmente.
Un diputado del PP que, para más inri, ejercía entonces de látigo en el Congreso, me agarró por el hombro un día de 2005 en un pasillo del Congreso y me dijo: «El nuestro [Aznar] se volvió loco durante la segunda legislatura, pero el vuestro [Zapatero] estaba ya loco cuando lo elegisteis» .
Dijo entonces haber callado por prudencia. Dice ahora, que lo dicho por aquel diputado popular era la auténtica realidad de quien entonces gobernaba en España. De esas formas zapateriles que desgrana en su libro da buena cuenta otra anécdota, suscribiendo las palabras del periodista Carlos Carnicero.
“Zapatero era teléfono adicto. Despachaba individualmente con sus ministros, que eran cuasi secretarios. La auténtica mesa del Consejo de Ministros estaba en la cancha de básquet que se hizo construir en el complejo de La Moncloa, donde jugaba con los íntimos: Javier de Paz, Barroso, Sebastián…”
Sobre todo Sebastián. Candidato fracasado a la alcaldía de Madrid y convertido después en ministro de Industria, Miguel Sebastián era, dice, “una bomba andante de su valedor, dice Leguina, que guió a Zapatero en la mayor parte de las aventuras en las que se metió y que urdió aventuras incomprensibles”
Porque para Leguina, lo del PSOE de Zapatero no fueron ideas sino aventuras, o más bien “ocurrencias”. Las de un “iluminado” que creía ser “el pacificador de Euskadi”, y tener la clave para sofocar a los nacionalistas con un Estatuto que, en su opinión, fue “la mayor locura política acometida por el PSOE, al menos, desde 1934”
Sus relaciones con el expresidente nunca fueron tibias. Como cuando le reprochó alguna decisión de Gobierno, y Zapatero le contestó con un “escribe muy buenas novelas, pero en cuestiones políticas no atina demasiado” O como cuando le cuestionó que el mérito no se tuviese en cuenta para los nombramientos. Y de eso, otra perla:
«Reunidos en torno a una mesa estaban Miguel Barroso, José Blanco y Javier de Paz cuando sonó el teléfono móvil de Blanco. Era el presidente del Gobierno. Después de hablar con él, Blanco volvió a la mesa e informó de que Zapatero estaba pergeñando un cambio de Gobierno, del que saldría el ministro de Defensa, José Antonio Alonso, y el presidente estaba pensando en poner al frente de aquel ministerio a una mujer. »ZP opina que al ser la primera mujer ministra de Defensa será un pelotazo mediático, y está pensando en Elena Salgado», informó Blanco. »Si lo que quiere es dar un gran pelotazo mediático, lo que tiene que hacer es nombrar a mi mujer [Carmen Chacón]. También es mujer, pero además es catalana y está embarazada. Eso sí que será un pelotazo», argumentó Barroso. Entonces Blanco, encantado con la idea, volvió a comunicarse con Zapatero… y de aquel profundo debate se derivó una muy conocida escena: la de una mujer joven con un »bombo» de ocho meses dando una orden militar: »Capitán, mande firmes»».
El socialista, que se define ya en el prólogo como un “atento y crítico observador” cuenta desde su tribuna cómo se orquestó la llegada de un nuevo socialismo que, reconoce, “no esperaba”, y que supuso la purga política de “todo lo que sonara a veteranía” para configurar una política basada en contentar a todo el mundo y descalificar a una derecha, “herencia del Franquismo”. Leguina hace la autocrítica, dice, que no ha hecho aún su partido. Y una radiografía letal: “o el PSOE se autorreforma o peligra su supervivencia”
Sus críticas al Gobierno de Zapatero no son nuevas.. ¿qué consecuencias trajo aquel nuevo socialismo?
Desde el punto de vista electoral, ahí están los resultados de noviembre de 2011… Pero el defecto ha sido mayor. Se rompió la conexión generacional entre los que estaban envejeciendo y los de abajo, se crearon y sustituyeron las viejas ideas por las nuevas ocurrencias. Se aumentó el crédito que tenían los nuevos en la presencia mediática, y creer solo en la imagen es un disparate. Cambió el estilo de dirigirse a la sociedad española. Se confundieron las viejas creencias de la socialdemocracia con cuestiones como el anticlericalismo, el ecologismo o el feminismo radical. Con Zapatero hubo una inmoderación en muchas cosas, y no se hizo nada en cuestiones clave como la fiscalidad de este país. Creo que lo que tendrían que haber hecho los que sustituyeron a Zapatero es enterrarle con honores y no impedir como han hecho una reflexión interna para superar todo aquello.
¿Cree que Rubalcaba no ha sabido aparcar el zapaterismo? Ha pasado página demasiado deprisa y quedan usos muy nefastos. Cuando un presidente te dice a la cara que cualquiera vale para cualquier cargo te está diciendo muchas cosas. El PSOE no puede admitir que todo el mundo vale para todo. Eso para empezar.
Los profesionales de la política… ¿Profesional de qué? Tienes que tener otras cosas antes de entrar en política. Se ha hecho normal lo que no es normal. El paso desde la primera comunición, a las juventudes… No trabajar en nada y seguir hasta la jubilación. Esto no es bueno para nadie. Ni para la gente ni para el partido. Una de las obligaciones de los partidos políticos es seleccionar a sus propias élites y da pena lo que está sucediendo en España.
¿Qué debería tener entonces la nueva política del PSOE, según usted? Pues para empezar, hay que cambiar los estatutos. Y decir eso, que para ser candidato a cualquier cargo del PSOE hay que haber trabajado antes. En cualquier cosa. El sistema de selección es mejorable. El PSOE ha dado un paso con las primarias, pero es un paso menor. Creo que el PSOE tendría que ser el abanderado de la defensa de la Constitución y la unidad de España, que lo ha defendido siempre y no sé ahora por qué no va a seguir. Y la defensa d eunos cambios en los usos políticos que este país está necesitando. Y eso exige una ley de partidos, unas prácticas impuestas…
Rubalcaba ya ha dicho en su círculo más íntimo que si el PSOE gana las europeas, se presentará a las primarias … ¿Tenemos Rubalcaba para rato? Creo que es un mal menor, me parece mucho más sensato que la media…
Perderá a Elena Valenciano… ¿Tiene opciones en Europa? No tengo nada contra ella. Pero es otra persona como son la inmensa mayoría de dirigentes. Entró en las juventudes socialistas y nunca ha estado fuera del partido. Con esos curriculums… Lo que se demuestra es que los partidos, no sólo el PSOE, tienen un defecto. La endogamia. Y a eso se suma el sistema auténticamente caquicil que tienen tanto el PP como el PSOE. Esto no se puede hacer entre cuatro personas.
De las primarias podría salir un nuevo líder. Carme Chacón, por ejemplo ¿Seria ella la renovación?. Carme Chacon es todo menos la renovación, Es una persona producto del zapaterismo y de la oligarquía que montó en su entorno.
¿Como ve el ascenso de Susana Díaz? Tiene un curriculum parecido a Valenciano. Más andaluz, pero parecido. Eso es el suicidio, no es sostenible a largo plazo.
Habla de la crisis interna del PSOE, ¿qué opina de la del PP? El PP hizo un programa para no cumplirlo. Nos engañaron prometiendo cosas imposibles y luego con echarle la culpa al anterior, vale todo. El PP se ha desgastado y creo que por haber mentido al electorado. Pero es el que está en el Gobierno, así que si salimos de la crisis será el beneficiado. El PSOE no ha hecho autocrítica y no puedes pasar de ser el partido de Gobierno a subirte al carro de las propuestas más radicales. Hay que mostrar menos gritos y más razones. ¿No ha sabido hacer oposición? Creo que no.
En su libro habla mucho de nacionalismo, y de una “dejadez tolerante que ha permitido crecer a los nacionalistas”… Creo que hay un error de perspectiva de ambos partidos, pensando que al nacionalismo habría que conllevarlo dándoles una cosa, luego otra, permiténdoles que echaran del foro público el castellano… Todas esas cosas, en lugar de aplacar las ansias separadoras, las han incentivado. Esa batalla había que haberla planteado antes…
Pero la dejadez ha sido compartida por PSOE y PP,¿ no ? Sin duda. El PSOE tampoco ha sabido gestionar este debate. Pero entre González y Aznar había una defensa de la Constitución, en favor de Felipe. Aznar es el gran responsable de la ley lingüística de Pujol y que no se recurrió al Constitucional. Y no se recurrió por Aznar.
El PSOE no tiene ahora una respuesta conjunta… La votación en el Parlament ha evidenciado la fractura del PSC. Pues eso se resolvería echando a estos chicos. Se han equivocado de partido. El PSC en muy poco tiempo ha perdido la mitad de los votos. Y más de la mitad de los escaños, así que por algo será. Ha hecho dejación de sus obligaciones respecto a una parte muy importante del electorado, como son los inmigrantes.
¿Habrá consulta? No puede haber consulta. La consulta no es el derecho a decidir, es el derecho de autodeterminación. ¿Cómo va a permitirse un estado serio que se produzca esto? Esto se lo pueden permitir los británicos, que son bastante curiosos…
UpyD, Ciutadans,… ahora Vox. ¿Se avecina el fin del bipartidismo? Creo que el bipartidismo es incompleto. No es una cosa mala para la estabilidad de los gobiernos, pero no está escrito en las estrellas que sean siempre los mismos partidos. Yo en estos no veo nada nuevo. Si por nuevo se entiende a los restos del PC reagrupados en Izquierda Unida, o a una vieja lideresa socialista, Rosa Díez, que se ha ido del PSOE y dice que los políticos deben decir lo que los ciudadamos quieren oir. Una concepción muy baja de la política. ¿Donde va Vicente, donde va la gente?.
Después de todo lo dicho en su libro…¿Zapatero ha sido el peor presidente de la Historia? Tanto como eso no sé, porque la Historia es amplia. Eso es mucho decir. Hemos tenido presidentes de España que eran dictadores.
Usted parece no querer jubilarse nunca… ¿Lo del político retirado no va con usted? Creo que es una obligación civica por mi parte. Contar lo que veo críticamente, intentar hacer un favor a los lectores y a la sociedad. Si está dispuesta a escucharme, claro.