La Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) ha pedido hoy que se amplíe hasta los seis años el requisito obligatorio de que los libros de texto se mantengan sin cambios y ha llamado a las comunidades autónomas a que mejoren su labor de inspección y control.
La CECU ha señalado que el encarecimiento progresivo del material escolar, con libros que incluyen CD o cuadernos adicionales que incrementan el coste, hace que esta partida sea la que mayor desembolso genera a las familias en la vuelta al cole, llegando a alcanzar los 250 o 400 euros por niño.
Por su parte, el presidente de CEAPA, Jesús María Sánchez, ha asegurado a Teinteresa que la «única fórmula que debe imperar en el sistema de libros de texto en esta época de crisis es la de la reutilización y préstamo».
Además, esta Confederación se ha referido a la dificultad de conseguir las ayudas directas que prestan algunas comunidades y a la escasa posibilidad de heredar los libros de texto de un año para otro «por los habituales cambios que se producen».
Por todo esto, la CECU ha subrayado la importancia de que las comunidades autónomas «lleven a cabo un mayor control sobre el requisito obligatorio de que los libros se mantengan sin cambios al menos durante cuatro años, desarrollando mejor su labor de inspección y control».
Asimismo, ha exigido que, en las actuales circunstancias de crisis, ese plazo se amplíe hasta los seis años y que se implanten en los colegios públicos y concertados sistemas de intercambio y donación de libros.
«No es normal que las familias tengamos que gastar entre 200 y 400 euros al año por cambiar de libros. Nosotros hemos puesto en marcha un mercadillo en donde cada familia que lo desee pueda canjear sus libros seminuevos», asegura Sánchez.
El 75% de las ayudas del Gobierno ya no existen y lo que deberían de hacer muchas escuelas y administraciones es «abrirse al mundo digital y nos ahorraríamos mucho dinero, tanto unos como otros», sentencia Sánchez.
Además, la Confederación de Consumidores y Usuarios ha mostrado su apoyo a una medida propuesta por las familias que pide que los libros de texto de las escuelas sean adjudicados por concurso público «para que se conjugue de la mejor forma posible una adecuada relación calidad-precio».