La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha calificado al año 2019 como ‘annus horribilis’ para la agricultura y la ganadería familiar en España debido al descenso de ganaderos, menos preceptores de la política agraria común (PAC) y la falta de reformas en el campo.
UPA ha destacado que el sector agrícola y ganadero ha sufrido especialmente la falta de un Gobierno con capacidad para tomar decisiones políticas.
La organización considera que una de las pocas notas positivas del año ha sido el «empoderamiento» de agricultores y ganaderos, con un «marcado orgullo rural». De este modo, ha hecho alusión a las reivindicaciones de la España vaciada, ya que se han escuchado «con especial fuerza».
En cuanto a 2020, la asociación espera que sea recordado como el año del desbloqueo político, de la puesta en marcha de medidas para lograr precios justos y aquel en el que la lucha contra la despoblación dé un paso adelante definitivo.