Según han informado fuentes judiciales, la sección 21 de la Audiencia de Barcelona estimó en febrero de 2016 el recurso presentado por el interno en base a los informes de la Junta de Tratamiento, que consideraron que el interno había «avanzado mucho con una actitud empática hacia las víctimas y corrigiendo su impulsividad», y su conducta se adaptaba a la normativa.
Asimismo, desde la Junta de Tratamiento de la cárcel de Ponent (Lleida) propuso la concesión del permiso de tres días dado que ya había cumplido la mitad de la condena, y había iniciado contactos con el exterior de manera progresiva, ya que de hecho Tomás Pardo ha tenido 18 permisos de menos de 48 horas –que solo dependen de autorización administrativa– sin que hubiera ningún incidente.
(HABRÁ AMPLIACIÓN)