La mosca del olivo es una plaga que se gesta en la aceituna del olivo,y de ello depende su supervivencia. La especie se asienta en España a lo largo de todo el área mediterránea, siendo Tarragona la ciudad más afectada este año por su actividad, que ya ha perdido el 10% de su producción.
El insecto pica la oliva para depositar sus huevos dentro, haciendo que el fruto se deteriore debido al crecimiento de la larva.
Esta plaga supone el mayor problema que sufre la producción de olivo ya que ocasiona daños directos, por la pérdida del fruto de la aceituna, e indirectos, como la transmisión de hongos y bacterias por el consumo de la aceituna que ha estado expuesta. Esto imposibilita la utilización del fruto tanto como aceituna de mesa como en aceite.
Los daños ocasionados por el insecto varían de una campaña a otra, donde entre el 10 y el 30% de la producción queda desechada.
El problema es que no hay métodos totalmente eficaces para acabar con la plaga, por lo que actualmente la Generalitat de Catalunya estudia la posibilidad de introducir moscas transgénicas para que se mezclen con la población endémica creando un femicidio de sus larvas, produciendo un descenso de la especie al no existir la posibilidad de producir descendencia.
Esta solución ofrecida por la empresa Oxitec podría suponer una revolución y solucionar definitivamente el problema de la mosca del olivo, sin embargo sus efectos sólo se han probado en laboratorio, por lo que la puesta en libertad de moscas alteradas genéticamente podría volverse de carácter retroactivo en la producción.
Soluciones tradicionales
Lo más socorrido para acabar con la mosca del olivo son los insecticidas arrojados desde avionetas, pero estos deben evitarse con el nuevo reglamento comunitario y cada vez serán menos utilizados.
Como solución alternativa, la Asociación de Agricultores y Ganaderos ofrece las pautas exactas que el agricultor debe seguir para luchar contra la especie.
La solución real sería invertir el dinero en la creación de un mecanismo autóctono que acabe con la producción de moscas de manera natural, sin la utilización de un ejército de animales de laboratorio ni la expulsión de insecticidades desde las alturas, que perjudica al medio ambiente.