En una pregunta parlamentaria dirigida al comisario de Medio Ambiente, Janez Potocnik, reclama «evaluaciones exhaustivas previas y periódicas» que contemplen también el riesgo de seísmos, y apunta especialmente su «preocupación» por el impacto que los seísmos registrados en la costa de Vinaroz puedan tener en los Lugares de Importancia Comunitaria de la zona, protegidos por la red Natura 2000.
«A la vista de lo que está sucediendo con estas prácticas que utilizan la inyección en el subsuelo, es urgente que la Unión Europea determine o bien su prohibición total o una moratoria, hasta que no se demuestre al cien por cien que no van a perjudicar a las personas y el medio ambiente», pide el eurodiputado en su pregunta al Ejecutivo comunitario.
Perelló insiste en que los riesgos de estas técnicas de extracción no convencionales pueden ser no sólo para el medio ambiente, sino también para la seguridad de las personas y pide a Bruselas que estudie todas las medidas posibles.
«El proyecto Castor, de la costa valenciana, es una buena muestra de lo que puede ocurrir cuando se duplique la potencia de inyección en el subsuelo como sucede con el fracking», ha alertado el eurodiputado, que pide «no dejarse deslumbrar por cualquier inversión, sin tener en cuenta las consecuencias a medio y largo plazo».