Un antiguo bosque pantanoso lleno de especies vegetales ha sido devuelto a la vida después de haber estado »sepultado» bajo las cenizas de un volcán en el norte de China. Aunque muchas de estas especies ya eran conocidas, la eupción creó una cápsula del tiempo que ha revelado un nivel de detalle desconocido hasta ahora, tal y como recoge la revista Nature.
Hermann Pfefferkorn, paleontólogo de la Universidad de Pennsylvania en Filadelfia, asegura que los científicos pueden inferir la riqueza del ecosistema de un bosque antiguo mediante el análisis de los fósiles; sin embargo, una imagen real de la composición de un ecosistema sólo es posible si se ha preservado un instante geológico en un área determinada.
Así, el paleontólogo y su equipo han logrado recuperar fósiles de hace 298 millones de años de este »bosque Pompeya», momento en el que una lluvia de cenizas de una erupción volcánica que se produjo a 100 kilómetros de distancia sepultó todos los árboles. Los científicos han analizado la posición individual de las plantas en tres grandes áreas que unidas suman 1.000 metros cuadrados.
Se han identificado seis grupos de plantas que se desarrollaron en la zona, tal y como ha señalado el paleontólogo a Proceedings of the National Academy of Sciencea, entre ellas lgunas especies de árboles tipo plumeros, con troncos que doblan la altura de los postes de la luz y un grupo de pequeños árboles con esporas que podrían ser los antepasados de los helechos. Lo increíble de la investigación es que los científicos no sabían que estas especies podían crecer juntas.