Los mayores problemas se han registrado en torno a las seis de la mañana, cuando el temporal de fenómenos adversos en la mar (Cantabria está en alerta naranja) ha coincidido con la pleamar, que estos días tiene un coeficiente muy alto. Esto hace que el agua rebase la playa y se adentre en la ciudad, inundando establecimientos y locales, según han indicado a Europa Press los Bomberos Municipales, que han realizado varias salidas durante la noche.
Las fuertes olas inundan plazas, garajes y locales en el Sardinero y derriban muros de piedra delimitadores de pisos
