Los sindicatos CSIF, USO y ANPE, representativos del profesorado de Religión en la comunidad andaluza, han criticado que la Consejería de Educación, Cultura y Deporte haya optado por una fórmula «poco sensata» cuando ha decidido que sea la dirección y, en su caso, el Claustro de cada centro el que tome la decisión sobre la carga lectiva que debe tener el área de Religión en cada uno de los cursos de Educación Primaria, lo que consideran una «dejación de funciones» que ha creado «malestar» en los colegios.
Recientemente, sindicatos y Junta mantuvieron un encuentro al objeto de tratar de «matizar» y «paliar» el «excesivo» protocolo instaurado por la administración para que las direcciones de los centros puedan ampliar el horario. La reunión, informaron a Europa Press fuentes sindicales, posibilitó fórmulas para «simplificar» dicho protocolo.
No obstante, las secciones han establecido en un comunicado conjunto que el protocolo ha llegado con mucho retraso a los centros, «con el agravante de que la versión en la plataforma Séneca, que es la que han tenido que cumplimentar los equipos directivos, también se ha activado tarde y era diferente a lo recogido en las instrucciones publicadas al efecto: esto ha hecho necesario el envío de unas aclaraciones e incluso ha habido que ampliar dos días el plazo inicial».
«Las competencias de las direcciones de los centros y el Claustro no han quedado muy claras y se han generado distintos problemas por falta de información y técnicos a la hora de introducir los distintos horarios», subrayan los sindicatos, que han agregado que esta situación «ha creado mucho nerviosismo y ansiedad en el profesorado de Religión por las grandes repercusiones que la comunicación correcta del horario de la asignatura tiene sobre su salario y condiciones laborales».
Así, CSIF, ANPE y USO se solidarizan con el profesorado que se está viendo afectado por esta «falta de consideración» hacia su persona y su labor educativa debido a la situación creada, y también con aquellos que, «por la actuación impositiva de la Consejería», han tenido que tomar una decisión que en absoluto debía corresponderles.
«La mezcla de sentimientos personales de unos y de otros, los planteamientos pedagógicos distintos, el diferente procedimiento seguido, las hipotéticas presiones recibidas en uno u otro sentido o las repercusiones laborales han creado un caldo de cultivo que podría generar un mal clima en el futuro próximo de algunos centros que, además de repercutir muy negativamente en la convivencia entre el claustro de profesores, podría incluso extenderse a otros integrantes de la comunidad educativa, llegando hasta el alumnado o sus padres», han lamentado.
Dado lo heterogéneo del procedimiento para la comunicación del horario del área de Religión, consideran conveniente una revisión del procedimiento seguido en los centros para determinar si en algún caso se ha producido algún error procedimental que pueda ser subsanado a la mayor brevedad, «en aras de la garantía jurídica a la que tenemos derecho todos y cada uno de los ciudadanos de la comunidad autónoma de Andalucía».
Para ello, los sindicatos han solicitado una reunión a la Consejería de Educación –que creen ha cometido con esta fórmula un «grave error»– y están a la espera de una convocatoria urgente. «En el caso de que nuestra petición no sea aceptada, nos reservamos el iniciar actuaciones judiciales y de cualquiera otra índole», apostillan.