«Al final de la segunda tanda de rodaje se me paró el coche y tuve que retirarme», indicó el madrileño de Toro Rosso, que partió desde la octava posición en Silverstone. «Ya sabíamos que la carrera sería más complicada que la ‘quali'», añadió.
«Es verdad que después de la primera parada recuperé mucho, tuve mucho mejor ritmo y el coche se comportó, se portó bien», sentenció Sainz, nuevamente acompañado en el circuito por su padre, el bicampeón del mundo de rallys Carlos Sainz.