Tal y como ha explicado la alcaldesa, María José García-Pelayo (PP), en un comunicado, «con este proyecto se pretende revitalizar este espacio público dotándolo de un nuevo equipamiento que dé vida al parque todos los días del año, recuperando un antiguo merendero y adaptándolo a los tiempos actuales».
Según se establece en el contrato suscrito con la empresa, el nuevo restaurante se ubicará en la zona de La Rosaleda, en una parcela de unos 1.000 metros cuadrados, fijándose un canon de 357.168 euros y un periodo de concesión de 30 años.
Además de la construcción del bar restaurante, se prevé el desarrollo de un calendario de actividades lúdicas, infantiles y de ocio complementarias a desarrollar durante todo el año.
En este sentido, el Consistorio adjudicó este servicio mediante concesión administrativa siguiendo la fórmula de «buscar la iniciativa privada para optimizar los equipamientos públicos existentes», concluye.