Los líderes en el Ayuntamiento de Barcelona del PSC, Jordi Martí, del PP, Alberto Fernández Díaz, y de UpB, Jordi Portabella (ERC), han recordado este martes en sendas ruedas de prensa al alcalde, Xavier Trias (CiU), que ya cuenta con un pacto de ciudad, el Plan de Actuación Municipal (PAM), la hoja de ruta del mandato, pactada con los socialistas y UpB.
Tras el acto de este lunes »L»alcalde respon» organizado por el Colegio de Periodistas, en el que Trias emplazó a PSC y PP a un pacto de ciudad para lo que queda de mandato y a la responsabilidad de la oposición para sacar adelante los Presupuestos, la oposición se ha mostrado crítica –también ICV-EUiA–, pero Portabella también dispuesto a entablar negociaciones para las cuentas.
La oposición ha mantenido su guión de los últimos meses, y buena parte de los grupos ven la responsabilidad de gobernar en Trias –reprochándole su «papel de víctima»–, que deberá pactarse inversión por inversión ante la prórroga presupuestaria, y con PSC retándole a presentar una cuestión de confianza para las cuentas, lo que el PP cree que podría haberse dado en otoño.
Para Martí, el pacto de mandato ya lo hicieron con el PAM, cuya aprobación el PSC facilitó con una abstención, ante lo que ha afirmado que propondría al primer edil que «se lo volviera a leer» porque si en el Presupuesto se hubiesen incorporado los proyectos que acordaron ha afirmado que seguramente la capital catalana no estaría con las cuentas prorrogadas.
«Lo que no puede ser es decir una cosa, hacer otra y ahora embadurnarnos», ha defendido, y ha considerado que Trias va tarde y que en el acto de este lunes dijo bastantes falsedades, como que no se podrían invertir 200 millones, de los 350 previstos en 2013, 150 de los cuales salen adelante sin aprobación por ser proyectos plurianuales.
CUESTIÓN DE CONFIANZA
Tanto Martí como Fernández Díaz han dado por finiquitada la geometría variable de Trias –pactar con diversos partidos en función del asunto–, y ambos han planteado la cuestión de confianza, último cartucho previsto por ley que tiene el alcalde para aprobar las cuentas, mientras que una moción de censura, cuya presentación correspondería a la oposición, parece no estar sobre la mesa.
El popular tiene cierta decepción con la intervención de Trias, que ha resumido con «vaguedades, modelo errático, sin hoja de ruta y con amnesias selectivas», y ha recordado al alcalde que ya existe el PAM y que su apoyo es incompatible manteniendo este documento vigente pactado con el PSC, y que si quiere hallar apoyos en el PP debe buscar su »sí» y no su abstención.
Ha puesto tres condiciones para pactar –dejar atrás el pacto con el PSC, poner freno a la «deriva independentista» y acabar con la subordinación frente al Govern–, y ha recordado al alcalde que si hubiese presentando las cuentas en el pleno y después tuviese que haber recurrido a la cuestión de confianza, hoy habría presupuesto o no habría alcalde, pero sigue sin coraje ni cuentas.
Portabella, cuyo grupo fue el único que votó »sí» al PAM, ha considerado un error de principio que Trias quiera abordar ahora un pacto de mandato, y ha planteado que «a ver si se quedará con menos gente de la que tiene», y se ha mostrado dispuesto a arremangarse por encima de intereses partidistas y negociar las cuentas porque la situación de la ciudad es crítica en plena crisis.
Según ha dicho a los medios Ricard Gomà (ICV-EUiA), Trias se muestra débil, gris e incapaz para afrontar los recortes y tener un pacto estable, ante lo que ha defendido que «no puede atribuir al resto de fuerzas su irresponsabilidad e incapacidad», pidiéndole un cambio de actitud y prioridades –que lo social no se quede en cortina de humo– más que una cuestión de confianza.
La próxima cita en la que se verán todos será este viernes en el pleno extraordinario que forzó el PSC para abordar un plan de choque contra el paro juvenil, lo que Martí ha dicho que «es el mejor pacto de ciudad que se puede hacer esta semana», y ha reprochado a CiU que quiera volver a lo de siempre, una mera declaración de intenciones sin que nada les comprometa.