El director general de Obras Públicas y Transportes, Víctor Garrido, acompañado por la alcaldesa de Ribafrecha, Ana Lourdes González, ha supervisado hoy el resultado de esta actuación que ha permitido dotar a este punto de la visibilidad, la anchura y la rasante necesarias para que los autobuses puedan incorporarse a la carretera con mayor seguridad.
El tramo final de la calle El Barranco cuenta ahora con una anchura de 8 metros, donde también se ha homogeneizado la pendiente. La actuación, que ha llevado a cabo la empresa riojana Eurocontratas, se ha completado con la remodelación del firme, el pintado de las marcas viales y la renovación de la señalización y la instalación de nuevas barreras metálicas de protección.
Para mejorar el drenaje y la canalización del agua de lluvia se han construido dos muros de escollera, un colector de aguas residuales y nuevas acequias.