Los Mossos d»Esquadra, conjuntamente con la Guardia Urbana de Barcelona, han diseñado un dispositivo «de máximos» para la final de la Copa del Rey entre el FC Barcelona y el Athletic Club de Bilbao con 1.500 agentes, más 400 policías barceloneses, que buscará evitar que las dos aficiones se encuentren y puedan haber incidentes, y que los concentrará en dos Fan Zone en Montjuïc y el parque de la Bederrida.
En rueda de prensa, el jefe de la Comisaría Superior de Coordinación Central, Ferran López, ha explicado que llegarán 38.000 aficionados con entrada y calculan que otros 10.000 sin entrada, que en conjunto se desplazarán en entre 7.000 y 8.000 vehículos, 500 autocares, nueve aviones y tres trenes charters.
El director de Mossos, Albert Batlle, ha destacado la «extraordinaria complejidad» del dispositivo de seguridad y movilidad, y ha confiado en que el sábado haya un espectáculo deportivo y una gran fiesta cívica, teniendo en cuenta que las dos aficiones no tienen antecedentes de enfrentamientos.
Sobre si la Federación Española de Fútbol les ha hecho algún requerimiento respecto a la posibilidad de que las aficiones piten el himno español, Batlle se ha limitado a decir que no les han hecho ninguno y ha pedido «respeto a todos los símbolos».
Al preguntársele si el nivel de alerta yihadista ha determinado el dispositivo, Batlle ha indicado que una final de Copa es siempre un partido de alto riesgo: «Tenemos un dispositivo para hacer frente a todas las contingencias».
DOS FAN ZONE
López ha explicado que el «objetivo es acomodar a la ciudad y el estadio las 100.000 personas que llegarán entre el sábado y domingo», de modo que se instalarán dos Fan Zone para ambas aficiones: la del Athletic Club en las fuentes de Montjuïc y la del Barça en el Parc de la Bederrida.
La Fan Zone del Athletic estará abierta el viernes de las 16.00 horas a la una de la madrugada, y el sábado de las 10.00 horas hasta después del partido, con lo que los aficionados sin entrada tendrán un espacio donde seguir el encuentro y en principio no se prevé que haya concentración de aficionados sin entrada en torno al Camp Nou.
Los que se trasladen a ver el partido lo harán en una «rúa» por la carretera de Sants, hasta el estadio, donde se situarán en el Gol Nord, mientras que los culés estarán en el Gol Sud, y entremedio hay 18.000 localidades que se atribuyen a la Federación española de fútbol.
Se prevé que si los bilbaínos ganan la Copa celebren en Montjuïc su victoria, ya que parte de los autocares, los aviones y los trenes no regresan a Bilbao hasta el día siguiente; en el caso de que gane el FC Barcelona, ya se ha diseñado un dispositivo de seguridad en Canaletes y el entorno de plaza Catalunya.
Según ha explicado el comisario jefe de Barcelona, Joan Carles Molinero, prevé que puedan acudir más aficionados que en la celebración de la Liga, cuando se congregaron 8.000 personas, y se instalará «un filtro permeable» en esa zona para evitar que se entre el mínimo posible de botellas y otros objetos contundentes.
López ha indicado que tienen controlados a un grupo de radicales del Athletic, Herri Norte, sin dar más detalles del número, y que harán seguimiento de su estancia en la ciudad y que en el dispositivo participa la Ertzaintza, que trasladará 12 efectivos.
Durante los días 29 y 30 se instalará un control de coordinación en la Conselleria de Interior de la Generalitat con presencia de Mossos, Guardia Urbana, Ertzaintza, Policía Nacional, Guardia Civil, Casa Real, Protección Civil y Sistema de Emergencias Médicas (SEM), además de los operadores de transporte.
A preguntas de los periodistas sobre la participación de los antidisturbios de la Guardia Urbana, que la posible futura alcaldesa, Ada Colau (Bcomú), plantea suprimir, Batlle ha indicado que garantizar el orden público es competencia de los Mossos y que la unidad de la Urbana se dedica a la seguridad de los edificios municipales, y el jefe de la Urbana, Evelio Vázquez, ha indicado que las UPS de la Urbana hacen su trabajo de control administrativo.