La propuesta ha tenido que volver a pasar por pleno en una sesión extraordinaria después de que hace dos semanas todos los grupos de la oposición –PSC, CUP, PP e ICV– se opusieran al proyecto.
En ese momento el gobierno de CiU advirtió de que esta postura hacía perder a la ciudad dos millones de euros de subvención procedente del fondo europeo Feder para proyectos medioambientales.
Según ha recordado durante el pleno la concejal de Hacienda, Maria Àngels Planas, el cambio de los contenedores permitirá unificar el tipo de recogida, mejorar la calidad del servicio –ya que se hará mucho menos ruido–, incentivar nuevos empleos y mejorar la limpieza de los mismos, ya que ahora será más sencillo.
Además, la portavoz de los populares, Concepció Veray, ha comentado que lo que ha hecho cambiar de opinión al PP es que se acelerará el plan para soterrar los contenedores de la ciudad, se mantendrá la frecuencia de recogida de la basura orgánica y la cesión de los contenedores viejos a centros especiales de trabajo.