Fuentes de Fitch han indicado a Europa Press que la bajada del rating «se debe al perfil débil de la economía andaluza, al hecho de que el nivel de ahorro bruto ha sido negativo y al incremento de la deuda».
Las fuentes han apuntado también que en la calificación actual a »BBB-» «se refleja la expectativa de Fitch de que será un desafío y una meta para la comunidad autónoma conseguir un balance o ahorro bruto positivo en 2014».
Alude en su informe al impacto negativo de la caída del sector de la construcción, y apunta el alto nivel de desempleo como una de las debilidades de la economía andaluza.
También aludió a las medidas de austeridad puestas en marcha por la Junta de Andalucía, especialmente para reducir los costes en la Administración, del personal y del número de entidades del sector público.
Además, las fuentes han recordado que Fitch decidió establecer a inicios de marzo de 2013 un suelo de rating, fijado en »BBB-» y han precisado en ese sentido que «el rating de la Junta de Andlaucía, si no hubiera existido ese suelo, seguirá siendo »BBB-», no más bajo, al contrario que otras comunidades autónomas, cuya calificación estaría por debajo de ese suelo; en el caso andaluz la calificación estaría por debajo de ese suelo».
Fitch apunta como las principales preocupaciones sobre la perspectiva económica de Andalucía el mercado laboral y la confianza del tejido empresarial local y ve el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) como un elemento positivo.