La FER ha indicado que en el contexto de una «leve recuperación económica, el ascenso de los precios se debe principalmente al fin del periodo de las rebajas en algunos sectores de temporada y también al nuevo aumento de los combustibles y de los costes energéticos en las últimas semanas».
El «elevado coste de la luz y de los combustibles repercute directamente en la competitividad de la actividad de las empresas y es un lastre para su crecimiento».
El «escenario más favorable en cuanto a la inflación ahora mismo es el de la estabilidad de los precios», con el objetivo de «recuperar al máximo la actividad de pymes y autónomos, que será la mejor señal de que la economía va por buen camino».