Así, los empleados han insistido en que han estado abiertos al diálogo «desde el primer día» y que «ése seguirá siendo su espíritu». No obstante, «no podemos ceder nuestros derechos ante amenazas y chantajes», han aseverado fuentes de los trabajadores a Europa Press.
En este sentido, han indicado que Calar Alto «nunca ha estado al margen de las circunstancias actuales», puesto que, según han apuntado, «desde que el centro empezó a tener desajustes presupuestarios han renunciado a las subidas de salario que figuran en su convenio».
De esta forma, han explicado que «incluso aceptaron una reducción de salario del 15 por ciento para los últimos meses de 2013, sin ningún tipo de contrapartida, para ayudar al centro a mantener el equilibrio presupuestario». «Todo esto sin disminuir un ápice la calidad del servicio que da el observatorio», han añadido los trabajadores, quienes han incidido en que «el compromiso de los empleados está fuera de toda duda».
Al hilo, la delegada del Gobierno en Andalucía señalaba este pasado viernes que el Ejecutivo trata de «adecuar a las circunstancias actuales» la situación y el presupuesto con el que cuenta el centro de Calar Alto, después de que sus empleados hayan amenazado con una huelga en caso de que no se detenga la externalización de los servicios de comedor y limpieza por parte del CSIC, que afirma que trata de ahorrar en el gasto del centro.
Además, Crespo subrayó que el centro es de «vital importancia» para la investigación, al tiempo que recalcó la «situación muy lamentable» en la que se dejó por parte del anterior Ejecutivo.