Según han informado en un comunicado, el punto de venta se encontraba en un piso de esta zona, y en el registro que efectuaron los agentes encontraron 2,5 kilos de hachís, más de un cuarto de kilo de cocaína, cerca de un kilo de marihuana y varias bolsas de éxtasis y de heroína.
La operación empezó el domingo 22 de enero, cuando varios ciudadanos informaron a una patrulla de la Guàrdia Urbana que en un inmueble se estaba llevando a cabo la venta de sustancias estupefacientes.
La Guardia Urbana montó un primer dispositivo en el que efectuó las tres detenciones, y ante las evidencias de que en el interior del piso podría haber más sustancias, traspasaron la operación a los Mossos.
Tras obtener la orden judicial de entrada y registro, los agentes de la policía autonómica accedieron a la vivienda y, a parte de las drogas, también encontraron una balanza de precisión y varias cantidades de dinero en metálico.
Los tres detenidos, que tenían antecedentes, pasaron a disposición judicial acusados de un delito contra la salud pública y el juez decretó libertad con cargos para los tres.
La investigación continua abierta y no se descarta que puedan producirse más detenciones.