Esta sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, se produce después del veredicto de culpabilidad emitido por un jurado popular. Se le condena por los delitos de asesinato y malos tratos habituales.
En la resolución se declara probado, siguiendo el veredicto de culpabilidad del jurado, que el acusado tuvo una discusión con la víctima y de manera sorpresiva se le acercó por la espalda y le golpeó varias veces con una botella de vino, quedando la mujer aturdida.
Entonces, la agarró del pelo y la arrastró al cuarto de baño cocina y, mientras le decía «¿ya no quieres pelea, verdad?», le clavó el arma «hasta en 131 ocasiones. Con esto pretendía causarle la muerte, pero también «producirle un sufrimiento adicional» a la víctima.
(HABRÁ AMPLIACIÓN)