Se trata de obligaciones por un importe de 10,3 millones euros con un plazo de vida residual próximo a 21,97 años, al 5 por ciento de interés y con fecha de vencimiento el 12 de febrero de 2036.
Según consta en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM) el objetivo es «incrementar la liquidez de la emisión y atender con esta reapertura la demanda de los inversores de valores a dicho plazo».
A finales de enero la Comunidad colocó 1.400 millones de euros en bonos a cinco años y al 2,875 por ciento de interés y el 10 de febrero, otros 1.600 millones en bonos a diez años y al 4,125 por ciento de interés.
Esta semana, con una colocación de diez millones a través de Goldman Sachs, y con ésta se colocarán en total 20,3 millones de euros.