Nacida en Blanes (Girona) en 1967 y licenciada en Derecho y Máster en Administración, la dirigente popular ha logrado mejorar sus resultados de 2010 pese el desgaste que ha supuesto para el partido el primer año de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno.
Pese al papel de actor principal de la política catalana que han desempeñado los populares en estos dos últimos años, todo apunta a que, tras el alejamiento con CiU por su proyecto soberanista, su rol se centrará en dos ámbitos: encabezar el rechazo a la independencia, y actuar de interlocutora del Gobierno en Catalunya ante el proceso soberanista.
Camacho se encargará así de tomar para Rajoy el pulso de la actualidad catalana, como ya ha hecho a lo largo de esta última legislatura, en la que ya advirtió, al principio con escaso éxito, de que la actual CiU no se asemejaba a la de Jordi Pujol y que apostaría fuerte por la independencia.
Siempre presente en las quinielas de futuros ministrables, la líder del PP catalán ha sido arropada hasta en cuatro ocasiones en esta campaña por el presidente del Gobierno, que ha destacado el trabajo hecho por Camacho pese a su juventud, y ha añadido un enigmático «y todavía harás mucho más».
La presidenta del PP catalán, que lleva cuatro años al frente del partido y reconoce en privado que no se ve liderándolo mucho más tiempo, ha logrado en ese corto período de tiempo aupar el partido hasta sus mejores resultados históricos en unas catalanas.
»La Jefa», como es apodada cariñosamente por sus correligionarios, ha logrado acercar al partido a la centralidad y sacarlo de «la irrelevancia» dentro de la política catalana, el principal objetivo con el que tomó las riendas de la formación.
Así, y tras superar el escaso nivel de conocimiento público con el que inició su andadura, Camacho ha encadenado los mejores resultados electorales de la historia del partido en unas autonómicas -18 diputados– en unas municipales -473 concejales y 11 alcaldías, entre ellas Badalona y Castelldefels– y de nuevo en unas autonómicas.
Además, la dirigente popular ha logrado situar a su partido en el centro del debate político como socio preferente del Govern de Artur Mas y tratando de arrebatar además a CiU el papel de interlocutor con el Gobierno para demostrar que el PP catalán también puede defender a los catalanes.
No en vano, uno de los actos más simbólicos de su mandato fue en la anterior campaña catalana junto a los líderes del PP vasco y gallego, Antonio Basagoiti y Alberto Nuñez Feijóo, en el Saló del Tinell en el que se firmó un compromiso que desterraba el fantasma del aislamiento del PP catalán que el primer gobierno tripartito había promovido en 2003 en ese mismo lugar.