El coche futbolista fue pillado por una cámara de Tráfico el pasado 3 de febrero y fue imputado por un delito contra la seguridad del tráfico, han confirmado a Europa Press fuentes de la Benemérita, que han negado otro vehículo a la misma velocidad que circulara junto a él.
La pena por conducir un coche y superar en 80 kilómetros por hora la velocidad permitida en vía interurbana será castigado, según el artículo 379 del Código Penal, con pena de prisión de seis a doce meses o con trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y, en cualquier caso, con la privación del derecho de conducir vehículos a motor y ciclomotores entre uno y cuatro años.