En este sentido, fuentes municipales han indicado a Europa Press que se ha mantenido «siempre» una actitud «dialogante» con el citado colectivo de trabajadores en busca de un acuerdo «satisfactorio para todas las partes». Sin embargo, subraya que no ha encontrado «vías de entendimiento» con la otra parte.
Por este motivo, indica que ante el «no avance» de la negociación se decidió un calendario que el Consistorio considera «justo, legal, más racional y que se adapta a las necesidades de una correcta prestación del servicio».
«No hay nada que temer porque el cambio de calendario se ha realizado bajo la más estricta legalidad, por lo que no habría nada que temer ante la hipotética visita de Inspección de Trabajo», concluye.