Así, obtuvo 1.119 votos a favor, 493 en contra y 62 abstenciones, siendo los más críticos con el documento los miembros de Máis Galiza y Encontro Irmandiño; mientras que Movemento Galego ao Socialismo pidió el apoyo al documento.
Durante el debate, fueron constantes las llamadas de los militantes a la unidad de la formación nacionalista a resolver los problemas y discrepancias internas. «Cooperar y no competir», fueron palabras del »irmandiño» Mario López Rico.
Por su parte, Alfredo Suárez, militante destacado de la UPG, ha llamado a la «exterminación de las diferencias» fuera de los órganos del BNG, que son «los que unen» a la militancia; mientras que la diputada en el Congreso Olaia Fernández Davila aseguró que los nacionalistas están «condenados y obligados» a entenderse.